Kobanê: La resistencia del siglo XXI

Los ataques del Estado Islámico (ISIS) en la ciudad de Kobanê, en el Kurdistán Occidental (Rojava-Norte de Siria), comenzaron en la primavera de 2014. Los grupos terroristas lanzaron su primer ataque el 22 de marzo, poco después de la celebración de Newroz, en la colina de  Mishtenur. Este no fue el primer enfrentamiento del ISIS y las Unidades de Protección del Pueblo (YGP/YPJ), que previamente habían luchado y derrotado a las pandillas Al Nusra. Los enfrentamientos armados habían tenido lugar entre los combatientes de las YPG/YPJ y las bandas de ISIS, cuando atacaron el territorio del cantón de Cizîrê, en Rojava. Aun así, Kobanê siempre permaneció en el centro de los ataques del ISIS, que surgió como una organización paramilitar internacional después de la eliminación de grupos similares en Siria, en primer lugar Al Nusra.

No fue una coincidencia

No fue solo una coincidencia que Kobanê fuera elegido como objetivo por ISIS. Las ciudades en el territorio de Rojava se habían aislado entre sí, como resultado de la política conocida como “cinturón árabe” del régimen Baath, que causó una desunión entre los cantones, declarados después del comienzo de la Revolución de Rojava.

La ciudad de Girê Spi (Tal Abyad), que había sido arabizada a través de la política del “cinturón árabe”, se convirtió en la base de grupos terroristas al comienzo de la guerra civil en Siria, por lo que los cantones de Kobanê y Cizîrê también terminaron desconectados.

Por otro lado, la ciudad de Jarablus, que también había sido limpiada de armenios y arabizada mediante la misma política, fue ocupada por grupos terroristas después del comienzo de la guerra civil, debido a lo cual las ciudades de Kobanê y Efrin también fueron desconectadas.

En este estado de cosas, las pandillas de ISIS, actuando de acuerdo con su estrategia conjunta con el Estado turco, consideraron apropiado atacar el cantón de Kobanê -que había estado bajo un sitio más duro que otros cantones-, carecía de un sistema militar estable y ocupaba un área pequeña, pero al mismo tiempo una posición estratégica.

El Estado turco señaló a Rojava como objetivo de ISIS

Para el Estado turco, la ocupación de Kobanê significaba sitiar los cantones de Cizîrê y Efrin y así romper la Revolución de Rojava; una nueva puerta que se abre en el Medio Oriente a través de ISIS y su alianza con Turquía, y el crecimiento del volumen comercial entre ambos. Fue el Estado turco que puso la idea de Rojava en la cabeza de ISIS, como una estrategia cercana a la suya.

ISIS, que siempre trató la revolución y la filosofía de Rojava con enemistad y atacaría inevitablemente esta región, aprobó esta estrategia presentada por el Estado turco, y así comenzó un ataque contra Rojava y Kobanê. Para ISIS, se abría una nueva puerta de entrada para su aliado Turquía; la ocupación de más áreas fue una oportunidad de oro para rodear a Cizîrê y Efrin, y lo más importante, por supuesto, obtener una cooperación estratégica con el Estado turco.

Kobanê se estaba convirtiendo en el primer objetivo para ambas fuerzas, por ser el lugar donde se desencadenó la revolución, y donde el régimen Baath fue expulsado por primera vez. En este contexto, ISIS realizó su primer ataque en el sur de Kobanê el 22 de marzo. Las pandillas de ISIS habían tomado de antemano las ciudades que rodean a Kobanê-Girê Spi, Jarablus, Minbic, Sirin, donde encontraban el Ejército Sirio Libre ELS) y Al Nusra. Después de llegar a las fronteras de Kobanê, las pandillas se instalaron en la línea de Şexler, en la orilla del río Éufrates. Ahora, Kobanê estaba completamente rodeada. El primer ataque comenzó en Sirin. Durante los enfrentamientos que estallaron alrededor de los silos de trigo, las pandillas enfrentaron una fuerte resistencia de las YPG/YPJ, que constituyó el primer golpe militar que infligieron a los terroristas en Siria.

El primer retiro de ISIS

Después de enfrentar el primer golpe en Sirin, las pandillas lanzaron un ataque contra la aldea de Kendalê en la tarde del mismo día. Kendalê pasó a la historia como el lugar de la primera retirada de ISIS, que nunca se habían retirado de ninguna de las áreas que atacaron durante su ocupación de grandes zonas y ciudades. En la noche del 22 de marzo, los grupos de las YPG/YPJ, que actuaban bajo el mando de los comandantes Hebun y Siyabend, comenzaron a escribir una historia que, más tarde, se convirtió en una epopeya con el transcurso de la batalla.

Las cuadrillas de ISIS recibieron fuertes golpes de los combatientes de las YPG/YPJ en la aldea de Kendalê y resistieron a cientos de grupos de pandillas, pese a que contaban con un número limitado de combatientes y armamento. Después de avanzar hasta la mitad de la aldea, los grupos de ISIS huyeron a raíz de la pérdida de más de 40 terroristas durante los enfrentamientos.

Al recibir un gran golpe y una fuerte derrota en el primer ataque a Kobanê, ISIS estaba empezando a entender que las cosas no serían tan fáciles como pensaban, ante la determinación de las YPG/YPJ.

La resistencia fue montada por un equipo profesional de solo 40 combatientes de las YPG/YPJ y de fuerzas de autodefensa de residentes locales de Kobanê, con armas pequeñas y granadas hechas a mano contra pandillas ISIS. Los terroristas continuaron sus ataques durante los meses de abril y mayo, pero al mismo tiempo ya se manifestaba la capacidad de la resistencia.

Un duro período

Un período difícil comenzaba ahora en Kobanê, que había estado rodeado por tres lados y enfrentaba una gran escasez de elementos esenciales, como alimento, agua y electricidad, que fueron cortadas por las pandillas.

Mientras tanto, el Estado turco estaba obstaculizando el acceso de ayuda a Kobanê, que tenía solo el lado del Kurdistán del Norte abierto, en medio de un asedio por tres lados. A su vez, el Estado turco estaba asediando a Kobanê desde el lado norte en nombre de ISIS.

Todas las circunstancias desafiantes se enfrentaron por medio de una producción conjunta, distribución equitativa, gestión conjunta y defensa propia.

La necesidad de agua provenía de los pozos abiertos en la ciudad y la electricidad de los generadores de energía comunes que trabajaban con el combustible disponible.

En el aspecto militar, se estaba llevando a cabo una defensa con granadas y bombas hechas a mano, y se estaba capacitando a los jóvenes en las filas de las YPG/YPJ.

Mientras todo esto sucedía, en la primavera de 2014, en Kobanê las pandillas de ISIS habían entendido que no podrían lograr un resultado favorable y comenzaron los preparativos para la primera gran ola de ataques integrales contra la ciudad.

La página de junio se iniciaba

Para el mes de junio, se había llevado a cabo una gran guerra en Kobanê. El armamento y la diferencia numérica entre las dos partes durante los ataques en tres frentes mostraba un nivel de desigualdad sin precedentes. Mientras que las pandillas de ISIS atacaban con miles de tanques, artillería y armas pesadas en los tres frentes, las YPG/YPJ resistieron, principalmente, con nuevos combatientes cuyo número no era superior a 500 granadas hechas a mano y viejos rifles Kalashnikov.

Ahora, en Kobanê comenzaba a escribirse la página de junio de la epopeya de la resistencia del siglo XXI.

Después de sufrir fuertes golpes en manos de combatientes de las YPG/YPJ durante la primavera de 2014 y de enfrentar resistencia a los ataques en todas las áreas, las pandillas de ISIS habían entendido que no sería tan fácil atacar a Kobanê.

El ISIS y el Estado turco, habiendo entendido que los ataques contra Kobanê -con un cierto número de grupos- no tendrían éxito, iniciaron su primer plan estratégico para perpetrar la mayor cantidad posible de ataques integrales desde todos los frentes.

Durante el curso de la batalla de junio, los puestos militares fronterizos del Estado turco sirvieron como salas operativas donde se estaban gestionando los ataques de ISIS. El Estado turco fue más allá y prestó más ayuda al ISIS, al proporcionar las coordenadas de los puntos de las YPG/YPJ en las áreas donde los terroristas enfrentaron dificultades.

Ataques simultáneos en los tres frentes

La ofensiva de junio comenzó el día 2 por la noche en el pueblo de Evdiko (en el este), Kunheftarê (en el sur) y Zor Mîxare (en el oeste). Esta fue la primera vez que las pandillas de ISIS realizaban ataques simultáneos contra Kobanê desde los tres lados.

El asalto fue el más exhaustivo jamás visto, ya que ISIS, que movilizó a miles de terrorista, utilizó todo tipo de armamento pesado, tanques, artillería y misiles, que había traído de la ciudad iraquí de Mosul, ocupada anteriormente.

En respuesta a estos ataques, las YPG/YPJ, compuestas principalmente de nuevos combatientes y con un número restringido, comenzaron la resistencia con armas ligeras que, quizás, no tendrían ningún efecto contra las armas de ISIS. El arma más pesada de las YPG/YPJ durante ese tiempo era una ametralladora Dushka, hecha a mano.

La resistencia en la frontera

Mientras la resistencia crecía contra las pandillas de ISIS, que intensificaron sus ataques en los tres frentes, la única área respirable era el lado del Kurdistán del Norte donde, sin embargo, el Estado turco estaba proporcionando asistencia a los grupos terroristas. La voluntad del pueblo del Kurdistán del Norte entró en juego contra el estado turco, que usó esta área como un cuarto frente para ISIS.

De conformidad con el llamado hecho por el líder del pueblo kurdo, Abdullah Öcalan, para la movilización después del comienzo de la ofensiva de junio, la población del norte del Kurdistán convirtió la aldea de Ziyaret, ubicada en la frontera, en un frente de resistencia.

La larga resistencia en la aldea de Ziyaret tenía como objetivo obstaculizar el apoyo que el Estado turco brindaba a ISIS en la frontera, y lo logró en gran medida.

La resistencia en Ziyaret significó una unidad de los pueblos del Kurdistán del Norte y del Oeste, que ya tenían un trasfondo histórico de solidaridad y una pérdida de significado de las fronteras, por primera vez en la historia desde el Tratado de Lausana.

Los jóvenes del norte

Mientras que la línea fronteriza se convirtió en un frente de resistencia tras el llamado de Öcalan, los jóvenes del Kurdistán Norte excedieron las fronteras y se unieron a la resistencia desde las filas de las YPG/YPJ.

La participación de cientos de jóvenes del norte de Kurdistán en las YPG/YPJ dio una gran moral y fortaleza a la gente de Kobanê, que había perdido a decenas de sus niños en las filas del PKK (Partido de los Trabajadores de Kurdistán) en la resistencia del Kurdistán del Norte. La resistencia de Kobanê estaba levantando el espíritu de unidad y solidaridad de una manera mayor que en cualquier período.

Historias de resistencia

A medida que crecía la dimensión de los ataques a Kobanê, también aumentaban las historias de resistencia y valentía. Los combatientes de las YPG/YPJ, bajo el mando del Comandante Botanê Reş, comenzaron a escribir las páginas de junio de la epopeya de la resistencia contra ISIS, en el pueblo de Evdiko.

Después de una resistencia de dos días y dos noches, los combatientes YPG/YPJ, comandados por Botanê Reş, infligieron grandes pérdidas a las pandillas ISIS y repelieron sus ataques con tanques y artillería contra la aldea de Evdiko. La resistencia desarrollada bajo el liderazgo de Botanê Reş, en el frente oriental, no permitió que ISIS siguiera con su avance.

Ante a los grupos ISIS que usaron e armamento pesado de manera más efectiva en el frente oriental, que era un campo sencillo y desprotegido, los combatientes de las YPG/YPJ se protegían entre sí con sus propios cuerpos y colocaban sus cuerpos debajo de tanques para neutralizar las bombas.

Las pandillas de ISIS sufrieron fuertes golpes, donde habían sido más efectivos, y esto los obligó a retirarse de todos los pueblos en los que habían ingresado en el frente oriental.

Botanê Reş, comandante de la resistencia en el frente oriental, cayó mártir durante una acción de autosacrificio contra los terroristas a finales de junio, y se convirtió en uno de los símbolos de esa batalla.

Las YPG/YPJ son la épica del frente del sur

Esos mismos días fueron testigos de la resistencia abnegada de los combatientes de las YPJ/YPG en el frente sur. A fines de junio, un grupo de siete combatientes de las YPJ fue rodeado en la colina de la aldea de Kûnheftarê y alrededor de la cual se habían logrado grandes logros contra ISIS.

La resistencia montada por siete luchadoras lideradas por el comandante Avesta, en un emplazamiento subterráneo de la colina, y el esfuerzo divino y el sacrificio hecho por sus camaradas, resumía el nivel de resistencia en el frente sur de Kobanê, por lo que las pandillas tampoco pudieron avanzar en este sector.

La comandante Meryem Kobanê, que estaba hablando con Avesta por radio durante el cerco, decía: “Camaradas, saldrán vivas de esa colina mientras estemos aquí. No se preocupen. Todos llegaremos a esa colina, incluso si todos somos asesinados, y empujaremos a ISIS lejos del emplazamiento”. Sus palabras fueron recibidas con un grito de alegría. Respondiendo a Meryem Kobanê, Avesta decía: “Incluso si no puedes, resistiremos con honor”. Hubo literalmente una carrera mortal que comenzó contra el tiempo.

Las pandillas de ISIS, al no haber entrado en el emplazamiento de combatientes femeninas que resistieron y les infligieron golpes, querían incendiar el cerro y envenenar a las combatientes con humo.

Varios combatientes de las YPG/YPJ que resistían en los tres frentes se movilizaron esa noche,. “Podemos luchar por ti también. Simplemente ve y salva a nuestras compañeras del cerco de las pandillas”, les decían.

Cuando el sol comenzó a iluminar Kobanê en las primeras horas de la mañana, la Comandante Meryem y sus combatientes hablaban a los rostros de sus camaradas, que resistieron valientemente en el emplazamiento subterráneo de la colina Kûnheftarê. Las siete guerreras habían sido sacadas del emplazamiento como resultado de una resistencia audaz.

Al mismo tiempo, se estaban infligiendo fuertes golpes a las pandillas en todas las aldeas del frente sur y se les impedía avanzar.

El frente occidental coordinado por el Estado turco

El frente occidental albergaba principalmente colinas, gracias a lo cual las pandillas no podían resistir a los combatientes de las YPG/YPJ, y sufrían los más fuertes golpes, en comparación con otros frentes.

Los comandantes de las YPG/YPJ describieron la acción del luchador Botanê Sor contra las pandillas en la aldea de Zor Mîxare: “El momento en que se rompió la voluntad de ISIS en esta ofensiva”.

Después de entrar solo en la aldea de Zor Mîxare, Botanê Sor luchó con granadas de mano y mató a decenas de miembros de ISIS. Herido durante la batalla, Botanê Sor no escuchó la advertencia de sus comandantes de “quedarse allí” así lo sacaban. Por eso, avanzó contra los grupos de ISIS con su última granada y mató a docenas de ellos antes de perder la vida.

Lo que sucedió fue que el Estado turco acudió al rescate de ISIS, que sufrió un gran pánico y fracasó en este frente después de esta acción.

Las pandillas de ISIS se habían mantenido desesperadas a raíz de la resistencia de un solo hombre, representada por el comandante de las YPG, Hogir Garzan, en las colinas Zagros, con vistas a la aldea de Ziyaret. Con las coordenadas de la posición del comandante Garzan del puesto militar fronterizo del Estado turco, las pandillas lanzaron fuego de tanques en esta área, lo que dejó al comandante Garzan martirizado.

ISIS derrotado en los tres frentes

Tras su aparición, ISIS sufrió la primera derrota, el primer fracaso y el primer retiro durante la resistencia de junio en Kobanê. Después de sus ataques de un mes de duración, las pandillas de ISIS sufrieron grandes pérdidas y comenzaron a huir. Mientras retiraban sus fuerzas y regresaban a su línea anterior, en los frentes oriental y meridional, las pandillas en el frente occidental tuvieron que abandonar una parte de la línea Şexler, que había estado previamente bajo su control.

Tras la retirada de las pandillas, los combatientes de las YPG/YPJ iniciaron la “Operación de Venganza de los Mártires de Kobanê”, que duró todo el mes de julio y finalizó con grandes pérdidas para ISIS. Decenas de pueblos en manos de ISIS antes de la ofensiva de junio fueron recuperados y liberados en los tres frentes.

Después de sufrir una gran derrota en el primer ataque importante contra Kobanê, las pandillas de ISIS se retiraron de la ciudad a finales de julio y se dirigieron hacia las localidades de Deir er Zor y Tabqa, que estaban bajo el régimen sirio y albergaban una gran cantidad de armas pesadas y municiones.

A principios de agosto, las pandillas comenzaron sus ataques contra Shengal.

Durante el mes de agosto, Kobanê fue testigo de enfrentamientos silenciosos y en pequeña escala, y una mejora de las obras para la reconstrucción.

Sin embargo, con el tipo de presentación de la gran fuerza de armamento pesado en Deir er Zor t Tabqa a las pandillas por parte del régimen sirio, se entendió que este silencio era la calma antes de la tormenta.

Después de atacar a Kobanê con una gran fuerza de armas durante el mes de junio, las pandillas de ISIS entendieron que no sería posible tomar la ciudad mediante ataques y estrategias ordinarias frente a la resistencia épica, que se intensificó principalmente en los pueblos de Evdiko al este, Kunheftarê al sur y Zor Mîxare al oeste.

Las pandillas que huyeron de la región a fines de julio también sufrieron grandes pérdidas durante la “Operación de Venganza de los Mártires de Kobanê”, que duró todo el mes de julio.

La ciudad, que estaba relativamente tranquila durante el mes de agosto, se enfrentaba a mediados de septiembre a otro ataque de desigual equilibrio de poder, similar al que existía entre el ejército persa y los 300 espartanos, como cuenta la historia. Las pandillas de ISIS atacaron la ciudad con una gran cantidad de terrorista y una fuerza armada capaz de ocupar varias ciudades grandes.

ISIS arrebata el armamento al ejército sirio

A lo largo del mes de agosto, las pandillas de ISIS realizaron ataques contra las bases del ejército sirio. El primer ataque, a mediados de agosto, tuvo como objetivo la sede militar del régimen que albergaba a miles de soldados, en la ciudad de Ayn İsa. El asalto, que comenzó a las 20:00 horas de la noche, terminó con la retirada de las tropas sirias y la toma por parte de ISIS de una gran cantidad de municiones. Luego de Ayn İsa, las pandillas atacaron el aeropuerto militar del régimen en Tabqa, que alberga una notable cantidad de armamento pesado, que también capturaron después de tomar el control del área en unos pocos días. Se apoderaron de al menos 40 tanques. Después de Ayn İsa y Tabqa, las pandillas atacaron Deir er Zor y se apoderaron de una gran cantidad de municiones pertenecientes al régimen. Durante el transcurso del mes de agosto, las pandillas de ISIS ganaron armas y municiones que el régimen perdió y eso bastaría para ocupar docenas de ciudades.

Después de enviar las armas incautadas del régimen a Kobanê, ISIS desplegó el armamento pesado que trajeron desde Irak alrededor de la ciudad.

A partir de la primera semana de septiembre, todos los enfrentamientos con el ejército sirio cesaron e ISIS movilizó todas sus fuerzas en Siria hacia Kobanê. Después de esta fecha, las fuerzas del régimen no llevaron a cabo operaciones aéreas ni terrestres contra las pandillas.

Durante los mismos días, los aldeanos de Kobanê presenciaron la entrega de armas a ISIS por parte del Estado turco, en el ferrocarril de Bagdad que pasaba por la frontera de Kobanê. Los comandantes de las YPG/YPJ anunciaron que ISIS se estaba preparando para una gran ofensiva, mayor que la anterior, con el uso de las armas provistas desde el lado de Turquía además de los otros tres frentes. Señalaron el papel del Estado turco en los ataques a Kobanê.

La situación en Kobanê

Kobanê había estado bajo asedio y aislado del mundo exterior durante dos años, como resultado de lo cual se satisfacían todas las necesidades basándose en sus propias fuentes. La administración del cantón estaba tratando de encontrar una solución a la falta de alimentos, iniciando un movimiento agrícola en la ciudad, donde no se estaba produciendo y el comercio se había detenido. Los generadores de energía y los pozos de agua se usaban para solucionar el problema de la electricidad y el agua, que las pandillas habían cortado después del asedio de la ciudad. En agosto, se estaba suministrando agua desde los pozos abiertos en la parte occidental de la ciudad, y la electricidad de los generadores de energía instalados en cada vecindario.

Nuevamente durante los mismos días, Kobanê todavía carecía de la fuerza suficiente y el número de combatientes para proteger a la ciudad de los ataques. Sin embargo, los combatientes de las YPG/YPJ estaban listos para enfrentar cada ataque con el espíritu del autosacrificio, después de infligir un golpe importante a las pandillas ISIS durante el mes de junio y julio con armas inadecuadas y una fuerza militar compuesta principalmente de nuevos luchadores, que se unieron a la resistencia desde el otro lado de la ciudad y el Kurdistán del Norte, en un llamado mundial a la movilización.

En la primera semana de septiembre, se formó una alianza militar en Kobanê con grupos progresistas del Ejército Sirio Libre, como Suwar Al Raqqa y Şemsî Şîmal. La alianza militar se llamó Burkan Al Fırat (Volcán del Éufrates), que se convirtió en la primera de su tipo entre los pueblos kurdos y árabes en la historia. Poco después de la declaración de la alianza, Burkan Al Fırat llevó a cabo una serie de acciones contra las pandillas de ISIS. La más sorprendente fue en el centro de la ciudad de Jarablus, ocupada por ISIS, en la segunda semana de septiembre, que dejó muchos pandilleros muertos.

Comienza la principal ofensiva

En la noche del 14 al 15 de septiembre, ISIS lanzó el primer ataque, comenzando la batalla que sería testigo de una defensa de los valores de la humanidad con un espíritu épico de autosacrificio, y pasaría a la historia al lado de la defensa de Stalingrado y la resistencia de los Espartanos contra los persas en las Termópilas.

Las bandas de ISIS comenzaron a atacar los pueblos de Tahlik y Zerik, en el oeste de Kobanê, con misiles, morteros y una serie de tanques. Mientras los comandantes de las YPG/YPJ se movían para esta área, llegaron informes de que las pandillas también habían comenzado a atacar las aldeas de Serzori, Qizeli, Huriye, Leqleqo y Qorike, en el frente oriental, con el acompañamiento de al menos ocho tanques. El 15 de septiembre por la mañana, ISIS también lanzó un ataque en el frente sur. A diferencia de los ataques simultáneos previos de los tres frentes, las pandillas ISIS ahora desplegaron armas y militantes en las partes sureste y sudoeste también, y comenzaron una ofensiva desde cinco frentes.

“Vamos a ganar esta guerra”

No pasó mucho tiempo para conocer la dimensión de esta ofensiva. Los comandantes de las YPG/YPJ ahora entendían que esto no era un ataque ordinario y un movimiento de ocupación, y fueron testigos de una desigualdad técnica y numérica en un nivel increíble. A medida que las pandillas de ISIS lanzaron esta ofensiva con todas sus fuerzas y armas en Siria, se hizo evidente que su objetivo era asegurar una ocupación completa de Kobanê en poco tiempo. La comandante de las YPJ Meryem Kobane dio esta explicación: “Esta no será una batalla ordinaria, sino una confrontación entre el salvajismo soberano dominante masculino y el poder espiritual y la voluntad de la modernidad democrática. Vamos a ganar esta guerra”.

Septiembre había pasado, y en los primeros días de octubre las pandillas habían llegado al pueblo Hellince, al este. Allí ocurrieron intensos enfrentamientos, y los fuertes ataques continuaron en la colina de Mishtenur. Mientras tanto, el avance desde la carretera de Alepo hacia la ciudad continuó. Al oeste, las pandillas tenían la colina de Izae bajo un pesado fuego de tanques.

Las pandillas tenían constantes copias de seguridad e intercambios en todos los frentes y posiciones, descansaban bien y atacaban con todo lo que tenían. Pero los combatientes de las YPG/YPJ a veces tuvieron que luchar en múltiples frentes y posiciones en un día, y mucho menos tomarse un tiempo para descansar. Los combatientes y comandantes de las YPG y YPJ, que casi nunca durmieron durante dos semanas en el abrasador calor de septiembre en Kobanê con muy poca agua o comida, dejaron estupefactos a las pandillas y sus seguidores e inspiraron asombro en los pueblos del mundo. Los combatientes de las YPG/YPJ que aumentaron la resistencia contra las pandillas, en circunstancias completamente desequilibradas, se estaban preparando para la guerra urbana.

 

YPJ COMBATIENTES HEROIZADOS EN MEKTEL Y KANIYA KURDA

Las luchadoras de las YPJ Ruken y Eylem estaban esperando a las pandillas en las trincheras cavadas a la entrada del barrio de Mektel. Lucharon duro y no dejaron pasar a los tanques. Las luchadores Ruken y Eylem corrieron hacia las pandillas con una gran cantidad de municiones cuando los vieron acercarse a Mektel, infligieron grandes pérdidas a las pandillas y dañaron los tanques. Ruken y Eylem no se movieron ni un ápice de sus trincheras, y lucharon hasta que sus municiones se agotaron, después de lo cual fueron martirizadas de manera heróica.

Un día después del sacrificio y la resistencia de Ruken y Eylem, las combatientes de las YPJ Jiyan Rojhilat y Gulan mostraron una resistencia similar en la colina de Kaniya. Las pandillas habían ingresado a Mektel, desde allí tomarían el barrio de Kaniya y entrarían en el centro de la ciudad de Kobanê. Comenzando desde el amanecer, Jiyan Rojhilat y Gulan pelearon hasta la noche a pesar de las armas de las pandillas y no los permitieron llegar a la colina de Kaniya. Después de todo el día de resistencia, Jiyan Rojhilat y Gulan fueron martirizadas y las pandillas ingresaron a Kaniya.

Arin Mirkan se convierte en un símbolo en Mishtenur

En los mismos días, hubo enfrentamientos a gran escala en la colina de Mishtenur. La colina fue alcanzada por armas pesadas y tanques, y se produjeron enfrentamientos entre los terroristas que se infiltraron en la colina y los combatientes de las YPG/YPJ. La colina de Mishtenur es terreno sagrado para la gente de Kobanê, y fue testigo de la resistencia sagrada de los combatientes de las YPG/YPJ. La colina cayó bajo control de las pandillas el 5 de octubre, después de días de heroica resistencia contra fuertes ataques. La comandante de las YPJ Arin Mirkan estaba furiosa porque la colina de Mishtenur cayó bajo el control de ISIS. Ella pensó que las pandillas necesitaban ser golpeadas fuertemente en Mishtenur, y decidió llevar a cabo una acción de sacrificio. Se preparó para la acción con gran determinación y se infiltró con pericia en las pandillas. Llegó al punto indicado y detonó los explosivos que llevaba, matando a docenas de miembros de pandillas. ISIS había llegado a la ciudad, pero se aterraron ante la resistencia y el sacrificio. A medida que las pandillas de ISIS avanzaban, perdieron su fe de que la situación “se manejaría en una semana”, y habían llegado a entender que pasarían por el infierno en Kobanê.

“Un infierno para ISIS”

Después de Mishtenur, las pandillas comenzaron a ingresar al vecindario de Kaniya desde el este. Al oeste, la colina Izae había caído bajo el control de las pandillas y los combatientes de las YPG/YPJ habían tomado posiciones en las trincheras cavadas en la colina Til Sheir. Hacia el sur, las pandillas habían llegado al cementerio Mártir Dicle, cerca de la entrada de la ciudad.

Durante esos días, la Meryem Kobanê dijo: “ISIS ahora ingresará a la ciudad a través de Kaniya. Pero esta ciudad será un infierno para ISIS. Serán expulsados ​​directamente”.

La resistencia fue llevada a la ciudad y Kobanê no cayó en una semana, por eso los medios turcos y el gobierno del AKP intentaron crear un ambiente de que “si ISIS llega al centro de la ciudad, Kobanê habrá caído automáticamente, no habrá resistencia”. El entonces primer ministro, el actual presidente Recep Tayyip Erdoğan, había expresado sus expectativas y decía que “Kobanê esté a punto de caer”, cuando ISIS comenzó a ingresar a la ciudad. Erdoğan estaba retorciéndose las manos y expresando este deseo, y el comandante general de las YPJ, Meysa Ebdo, respondió: “Kobanê solo caerá en sus sueños. La resistencia recién comienza, Kobanê será un infierno para ISIS y sus seguidores”.

Con ISIS entrando en la ciudad, las palabras de Meysa Ebdo llegaron con la resistencia sobrehumana y el heroísmo de los comandantes y combatientes de las YPG/ YPJ.

En los primeros tres meses de la resistencia, los combatientes de las YPG/YPJ mostraron una resistencia de defensa gloriosa, y ya era la hora de que los comandantes y combatientes de las YPG/YPJ lanzaran el proceso que llevaría a declarar a Kobanê como el infierno de ISIS. El lanzamiento tuvo lugar a principios de diciembre, bajo el nombre de “Operación de Emancipación de Kobanê”.

Todo listo para el golpe final

El proceso de la operación había comenzado en Kobanê, las YPG/YPJ habían abandonado la defensiva después de un largo tiempo y se estaban preparando para la operación. Eso creó gran moral y entusiasmo. Los combatientes de las YPG/YPJ limpiaron la mayoría de la ciudad de pandillas en poco tiempo con esta moral y entusiasmo, y al final llegaron a la colina de Mishtenur y se dieron cuenta de los sueños de los mártires Givara, Cudi, Dicle y muchos otros mártires de Kobanê. Después de Mishtenur, la segunda maniobra a gran escala fue la operación del frente sur. Esta operación limpió a las pandillas por completo de este frente.

En el segundo día de la operación, el comandante del frente oriental Mazlum Kobanê dijo: “Anunciaremos la libertad en cuatro calles”, y eso es lo que sucedió. En el tercer día de la operación, los preparativos se completaron para dar el golpe final y fatal a las pandillas de ISIS. La declaración de la libertad de la ciudad sería a tiempo para el aniversario de la declaración del cantón, el 27 de enero.

La operación entonces comenzó. Se les pidió a los periodistas que se quedaran atrás y no se les permitió entrar al frente.

Algunas horas después de la operación, los cantos comenzaron a llegar a través de la radio: “Biji Serok Apo”, “Biji Berxwedane Kobanê”.

Kobanê debía ser declarado libre después de que Kaniya fuera tomada. Los luchadores estaban inquietos por la emoción. No fue fácil, durante más de cuatro meses lucharon con uñas y dientes, el dedo en el gatillo en todo momento, a través del frío, sin dormir, con poca comida y munición insuficiente. Siempre insistiendo en vivir libres, marchando hacia la muerte, fue una resistencia que casi desafía las leyes de la naturaleza. Lucharon contra mejores armas, mejor logística, mayor cantidad de enemigos y contra métodos inhumanos.

Los combatientes de las YPG/YPJ corrieron a la colina de Kaniya para colocar una bandera gigante de las YPG, cantando “Biji Serok Apo” y “Biji Berxwedana Kobanê”. Los carteles del líder popular kurdo, Abdullah Öcalan, también fueron montados sobre el lugar.

Después Meryem Kobane dijo: “Declararemos a todo el mundo en la colina de Kaniya que la ciudad de Kobanê es un infierno para ISIS”. Sus palabras se hicieron realidad en el día 134 de la implacable resistencia. La resistencia de Kobanê creó un “antes y después de Kobanê”. La historia fue interrumpida en Kobanê, y fue reescrita. Si Stefan Zweig estuviera vivo para verlo, habría dicho: “Kobanê es el momento en que la estrella brilló en la historia humana”.

FUENTE: ANF/Traducción y edición: Kurdistán América Latina