Las familias de los mártires de la ciudad de al-Tabqa afirmaron que no dependen de ninguna fuerza externa, sino que confían en sus propias fuerzas para defender las conquistas de la región que está siendo atacada por el estado de ocupación turco
El norte y el este de Siria son testigos, a diario, de los ataques del estado de ocupación turco, en medio del silencio de las fuerzas internacionales. Estos ataques han recibido reacciones de ira y una ola de resentimiento popular hacia ellos y el silencio de las fuerzas internacionales hacia ellos.
Al respecto, Abd al-Hakim al-Hussein, hermano del mártir Abd al-Rahim al-Hussein, dijo: “Debe haber un fin definitivo a los ataques a los que la región está expuesta a diario, y estos Deben detenerse los actos inhumanos contra civiles pacíficos en el norte y el este de Siria”.
Al-Hussein indicó: “Las fuerzas internacionales deben condenar los crímenes de la ocupación turca y establecer tribunales para revelar los hechos ocultos y refutar los falsos pretextos utilizados por Turquía para lanzar la agresión contra las áreas de la Administración Autónoma”.
Hizo hincapié: “Nosotros, las familias de los mártires en el norte y el este juntos, no dejaremos de exponer los crímenes y masacres cometidos por el estado de ocupación turco contra nosotros, y al establecer el principio de la guerra popular revolucionaria entre las filas de la sociedad, enfrentaremos todas las prácticas bárbaras”.
Al final de su discurso, Al-Hussein señaló: “Los componentes del norte y el este de Siria, árabes, kurdos y siríacos, son un solo pueblo, y la solidaridad y la cohesión nos han unido desde la antigüedad, y debemos proteger esta solidaridad a través del cual derrotaremos todos los intentos de ocupar la región y desplazar a sus residentes”.
Por su parte, Mahmoud al-Shami, padre del mártir Ibrahim al-Shami, dijo: “El estado de ocupación turco está cometiendo los crímenes más atroces contra nuestras regiones, y las escenas de bombardeos diarios en nuestra tierra se han convertido en un escenario recurrente”.
Continuó: “Todo esto es para lograr sus metas y objetivos, por ejemplo, el intento de desplazar a la población indígena, realizar operaciones de cambio demográfico y asentar mercenarios en el norte de Siria, como sucedió en las áreas controladas por sus mercenarios”.
Al-Shami señaló: “Nuestras demandas de poner fin a los crímenes del estado de ocupación turco no se detuvieron, pero las fuerzas internacionales no movieron un dedo, por lo que llegamos a un resultado, que es confiar en nosotros mismos y en nuestras fuerzas frente a los planes hostiles”.
Al-Shami enfatizó, al final de su discurso, “la necesidad de fortalecer la unidad popular entre los componentes de la sociedad y adoptar el principio de la guerra revolucionaria del pueblo como arma para combatir los ataques del brutal estado de ocupación turco”.
Por su parte, Muhammad al-Sheikh, padre del mártir Ibrahim al-Sheikh, condenó los ataques de la ocupación turca y los bombardeos del norte y este de Siria, y dijo: “El estado de ocupación turco continúa su agresión contra las áreas seguras, y no se ha adherido a ninguna resolución internacional que exija un alto el fuego en la región, y la responsabilidad de detener esta agresión es de los países que pretendían garantizar la paz en la región”.
Al concluir su discurso, Muhammad Al-Sheikh afirmó: “No confiaremos en ninguna fuerza externa, defenderemos nuestra tierra por nuestra cuenta, y la victoria se logrará consolidando el principio de la guerra popular revolucionaria entre las filas de la gente.”
Fuente: ANHA
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