Los daños del terremoto han alcanzado niveles alarmantes en las aldeas del Kurdistán Oriental (Rojhilat). El número de muertos se estima en más de 500 y los heridos ascienden a 5900.
El seísmo, que fue de 7,3 en la escala de Richter, se produjo en la madrugada de domingo al lunes y afectó tanto a Rojhilat como al Kurdistán iraquí (Bashur).
La agencia de noticias ANF informó que la cifra de muertos sigue aumentando en ciudades y distritos como Kirmanshan, Qasr-e Shirin, Serpol Zehap, Ezgele, Dalaho, Selas Bawecani.
A medida que las unidades de rescate alcanzan pueblo y aldeas, bajo ciudades y distritos, se revela una verdadera calamidad, indicó ANF.
Desde la copresidencia del Consejo Ejecutivo de la Unión de Comunidades de Kurdistán (KCK) se emitió un comunicado en el que se convoca al pueblo a “ayudar a aquellos que fueron afectados por este devastador terremoto”.
“La cualidad más importante de una sociedad es la solidaridad. Es nuestro principal deber humano y patriótico sentirnos responsables por nuestro prójimo, nuestra ciudad y nuestra sociedad en general”, señalaron desde la KCK.
“Por lo tanto, nuestra gente en todas partes de Kurdistán y en el extranjero debería ser solidaria con nuestra gente en el Kurdistán oriental y meridional”, destacó el comunicado.
FUENTE: ANF/Traducción y edición: Kurdistán América Latina
