El Co-Presidente Ejecutivo del KCK (Unión de Comunidades de Kurdistán) Cemil Bayik declaró que Tayyip Erdogan y el gobierno del AKP estuvieron exponiendo a Turquía a grandes peligros con sus políticas histéricas e impertinentes.
El Co-Presidente Ejecutivo del KCK Cemil Bayik escribió un artículo que fue publicado en los periódicos kurdos Özgür Yeni Politika y Azadiya Welat, el que fue luego traducido a través del servicio ANF en inglés.
“La prensa partidista y los funcionarios del AKP, especialmente el presidente Tayyip Erdoğan, hablan de la patria y la nación cada vez que abren la boca. Como si alguna entidad fuera a robarles la patria a los turcos, y como si estuvieran llevando a cabo una defensa santa de su patria. El mundo nunca ha visto semejante distorsión inmoral de la verdad. Ellos queman ciudades kurdas y al mismo tiempo dicen que ‘algunas personas’ quieren desterrar a los turcos.
El movimiento de liberación kurdo ha hablado de una patria común sin problematizar las fronteras políticas de Turquía. Pero Tayyip Erdoğan insistentemente habla de una ‘patria’, es decir, la patria turca. Él ve al Kurdistán como un pedazo de tierra que hay que conquistar y turquizar. Nadie está invadiendo la patria turca; pero las tierras de los kurdos están siendo reducidas a cenizas, como en una invasión, y los kurdos se enfrentan a su deseo genocida. Este es el problema en Turquía. No es que alguna entidad misteriosa esté detrás de las tierras turcas. Pero hay un problema con su mentalidad y una política que genera grandes problemas para Turquía a nivel local e internacional.
Las ciudades están siendo quemadas en el Kurdistán, y las banderas turcas están colgadas por todas partes. Los soldados y policías que están siendo empujados a la muerte en el Kurdistán son presentados como héroes que salvan la patria. Esto es un engaño total. El gobierno del AKP está enviando soldados y policías a morir para mantener su hegemonía. La demanda de los kurdos es una y sólo vivir una vida libre y democrática en sus propias tierras con su propia lengua y su propia identidad. Los kurdos tienen tanto derecho a la autonomía como han tenido el derecho a la leche de su madre. Decir que están ‘convirtiendo estas tierras en la patria’ quemando ciudades, matando indiscriminadamente a mujeres, niños o ancianos kurdos, es admitir su mente y política colonialista invasiva y genocida.
Los únicos que están poniendo en peligro la patria turca y a Turquía son la mentalidad, la política y el gobierno actuales. Tayyip Erdogan y el gobierno del AKP no han comprendido la ley de los turcos que viven en estas tierras y que hacen de estas tierras su patria. No ha entendido la ley de los turcos que viven en estas tierras, prosperando, tanto como los sultanes otomanos de los que él habla con tanta frecuencia. Por el contrario, está exponiendo a Turquía a grandes peligros por ir contra la ley de los kurdos que viven en estas tierras.
El Presidente Apo (Abdulla Öcalan) ya ha declarado que los turcos actuaron junto a los kurdos en 1071, 1514-16-17 y durante la década de 1920 y que su avance en Europa y Oriente Medio fue posible gracias a las buenas relaciones con los kurdos. Él ya había dicho que los turcos se convirtieron en una potencia en esta geografía cuando establecieron buenas relaciones con los kurdos, y que esta dialéctica del poder se invirtió cuando lucharon en su contra. Ahora, ¿son los kurdos o el gobierno del AKP y sus aliados fascistas los que traicionan la historia? Está claro que los que han lanzado una guerra contra el pueblo kurdo son los que han traicionado la historia de Turquía con respecto a la relación entre kurdos y turcos. Son los que consideran a las tierras de los kurdos como un lugar para invadir. Tayyip Erdogan, las fuerzas del Estado, los miembros del AKP y la prensa partidista están tratando de ocultar esta verdad y todos los crímenes que han cometido contra los pueblos de Turquía.
Si alguien está actuando como enemigos de Turquía, esos son Tayyip Erdoğan, las fuerzas del Estado y sus aliados fascistas. Sólo los enemigos de Turquía desean emprender una guerra contra el pueblo kurdo de esta manera. Los que niegan la existencia del pueblo kurdo y su vida libre y democrática están muy satisfechos ahora. Si alguien está poniendo en peligro a Turquía, es Tayyip Erdoğan y las fuerzas del Estado.
Los kurdos no van a renunciar a su identidad, a su cultura y a una vida libre y democrática. Tayyip Erdogan y las fuerzas del Estado nunca podrán destruir al pueblo kurdo por completo, por lo que las políticas actuales significarán el fin de Turquía. Tayyip Erdogan y las fuerzas estatales recibieron el apoyo de ciertos poderes para destruir las ciudades kurdas, pero a cambio de qué? El gobierno no es capaz de responder a esta pregunta, y se ha convertido en un títere de esos poderes. No importa lo mucho que hablan de patriotismo, ellos son los únicos que están exponiendo al peligro a Turquía. ¿Los Paşa Enver, Talat y Cemal también se pensaron a sí mismos como patriotas, y que fue lo que terminó sucediendo? ¿Van a ser juzgados en base a sus pensamientos o a las consecuencias de sus acciones?
Hoy en día, Tayyip Erdoğan se ha convertido en Enver Paşa en Turquía y está tratando de convertirse en el líder del mundo turco. Con sus políticas sectarias, chauvinistas y nacionalistas ha expuesto a grandes peligros a Turquía. Enver Paşa se subió al caballo otomano pero terminó llevando al final a los otomanos. Hoy en día, Tayyip Erdogan y las fuerzas del Estado están subidos al caballo de Turquía y están a punto de llevarla al extremo.
El patriotismo en Turquía no está usando los recursos del país para su hegemonía, haciendo felices a los enemigos de Turquía. El verdadero patriotismo en Turquía está impidiendo un gobierno histérico e impertinente y está convirtiendo a Turquía en un país compartido y democrático para todos los pueblos.
La historia no es sólo el pasado, sino también el presente. Cada uno debe echar un vistazo a la historia y a la dialéctica de las relaciones entre kurdos y turcos, y decidir entonces, cómo debería ser el futuro”.
FUENTE: ANF News / Traducción: Nathalia Benavides