El Comité de Relaciones Exteriores y Alianzas de la Comunidad de Mujeres de Kurdistán (KJK) emitió una declaración condenando el asesinato de la activista kurda Nagihan Akarsel en la ciudad de Sulaymaniyah, en el sur de Kurdistán (Bashur, norte de Irak), perpetrado ayer.
A continuación publicamos la declaración completa de la KJK:
Nos enteramos con gran rabia sobre el asesinato de Nagîhan Akarsel, miembro de la Academia Jineolojî y activista desde hace mucho tiempo del Movimiento de Liberación de Mujeres de Kurdistán. Su asesinato es uno de una serie de asesinatos selectivos de figuras destacadas de la revolución de mujeres en Kurdistán por parte del estado turco fascista.
Nagîhan Akarsel fue brutalmente asesinada esta mañana en la ciudad de Sulaymaniyah en la región kurda de Irak cuando salía de su casa. Como periodista, escritora, militante y miembro de la Academia Jineolojî (“Ciencia de la mujer y la vida”) desde hace mucho tiempo, era muy conocida dentro de la sociedad kurda, así como entre las mujeres. Miraba hacia atrás a casi tres décadas de lucha y resistencia incesantes, poniendo en práctica continuamente la filosofía de Jin, Jiyan, Azadî (Mujer, Vida, Libertad).
El reciente asesinato de Nagîhan Akarsel no constituye un caso individual. Durante casi exactamente 10 años, el estado turco fascista y misógino ha estado tratando de detener la Revolución de las Mujeres en Kurdistán asesinando a sus principales militantes. En este sentido, podemos ver un vínculo claro entre la masacre de París del 9 de enero de 2012 contra Sakine Cansız, la masacre de Kobanê del 23 de junio de 2020, en la que murieron tres integrantes del movimiento de mujeres de Rojava y, más recientemente, el asesinato de nuestra camarada Nagîhan Akarsel.
El Estado turco fascista es muy consciente del papel de liderazgo de la fuerza organizada de las mujeres dentro del movimiento de libertad kurdo. Por lo tanto, para destruir nuestra resistencia, quebrantar nuestra voluntad revolucionaria y liquidar nuestra lucha de liberación, ataca sistemáticamente a las mujeres líderes de nuestro movimiento.
Además, el asesinato de Nagîhan Akarsel se alinea con una serie de asesinatos por parte de la inteligencia turca en el Kurdistán del Sur en el último año, que resultó en la muerte de cuatro miembros y simpatizantes del Movimiento por la Libertad. Todos estos asesinatos ocurrieron en la ciudad de Sulaymaniyah, que pone a cargo a los funcionarios de la administración provincial, así como al Gobierno Regional de Kurdistán. No aceptamos que la inteligencia del estado turco anti-kurdo pueda usar el suelo controlado por los kurdos para sus planes sucios y asesinatos brutales. Esperamos que la administración provincial de Sulaymaniyah tome urgentemente todas las medidas necesarias para proteger la seguridad de los kurdos en Kurdistán y arrestar a los perpetradores.
Si miramos la situación más allá de nuestras propias fronteras, podemos reconocer una política y actitud similar hacia las mujeres revolucionarias líderes en diferentes partes del mundo, lo que nos muestra que nos enfrentamos a un contraataque global de la misoginia capitalista, con el objetivo de prevenir nuestro siglo se convierta en la era de la liberación de la mujer. Por eso nos atacan con tanta brutalidad, de manera organizada y sistemática. Pero hay una verdad que tienden a olvidar: no importa lo que hagan, no podrán impedir nuestra liberación, no podrán detener la revolución de las mujeres. Si nos quitan una, la supliremos con miles. Esta realidad sale a la luz hoy también en Kurdistán Oriental e Irán en el levantamiento popular que comenzó después de la muerte de Jîna Mahsa Amini.
Como organización coordinadora confederal del Movimiento de Liberación de la Mujer de Kurdistán, condenamos con vehemencia al estado turco fascista, que es un estado asesino, y a sus colaboradores locales. Condenamos a la comunidad estatal internacional, cuyos miembros reclaman una “política exterior feminista”, pero permiten que el estado turco mate a las revolucionarias kurdas dentro y fuera de sus fronteras.
Hacemos un llamado a las mujeres de Kurdistán y del mundo para que adopten una postura clara contra los asesinatos selectivos de miembros y simpatizantes del Movimiento de Libertad Kurdo por parte de Turquía, especialmente del Movimiento de Mujeres. Es de vital necesidad que nosotras, como mujeres del mundo, contrarrestemos los ataques del sistema patriarcal mundial, que pretende evitar que la era de la revolución de las mujeres se haga realidad de manera organizada y eficaz. En este sentido, hacemos un llamado especial a los grupos autónomos de mujeres, movimientos revolucionarios, científicas feministas y a todas las mujeres del mundo que luchan por construir una vida libre a abrazar la memoria de Nagîhan Akarsel y la resistencia que representa al protestar contra su asesinato. Los llamamos a defender la revolución de las mujeres tomando una posición firme contra todo tipo de ataques dirigidos contra el Movimiento de Liberación de las Mujeres de Kurdistán.
¡Levantémonos contra todos los regímenes fascistas y misóginos convirtiendo nuestros levantamientos en una revolución mundial de mujeres! Abracemos la memoria de nuestro camarada Nagîhan Akarsel organizando nuestra lucha común en un nivel superior, basado en la noción de Jineolojî.FUENTE: ANF
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