El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, criticó este martes la propuesta del ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, quien sugirió que Ankara podría ceder el control de la ciudad kurda de Afrin al gobierno sirio.
La agencia Interfax informó el lunes que Lavrov, en una conferencia de prensa, expresó que la forma más fácil de normalizar la situación en Afrin era poner el área bajo el control de Damasco.
“Sabemos muy bien a quién le entregaremos a Afrin. Primero, hablemos sobre la entrega de áreas controladas por otros países a Siria”, declaró Erdogan.
“El enfoque de Lavrov no es correcto. Sabemos mejor que nadie a qué lado debe transferirse Afrin. Cuando llegue el momento, le daremos a Afrin a sus habitantes”, agregó el mandatario turco, que ordenó el 20 de enero pasado la invasión militar sobre la región kurda del norte de Siria.
Erdogan manifestó: “Determinaremos el tiempo. Depende de nosotros, no de Lavrov”.
El objetivo de Ankara es crear un área en Afrin para trasladar a los grupos terroristas que son sus aliados y, de esa manera, cambiar la demografía de la región.
La operación militar turca cuenta con el apoyo de grupos mercenarios como el Ejército Libre de Siria, el Frente Al Nusra y el Estado Islámico (ISIS).
Las fuerzas turcas tomaron el control total de Afrin el 18 de marzo después de una ofensiva de dos meses que le costó la vida a más de 300 civiles y generó que al menos 200 mil pobladores tuvieran que inmigrar forzadamente.
Erdogan justificó la invasión argumentando que “el objetivo principal es entregar Afrin a sus verdaderos dueños. ¿Cuál es nuestro objetivo? ¿Tenemos 3,5 millones de refugiados sirios viviendo en nuestras tierras? Nuestro objetivo es repatriar a estos hermanos y hermanas de Siria tan pronto como sea posible. Hay pasos actuales en esta dirección”.
El 16 de enero pasado, el presidente turco respaldó las acciones del Ejército Libre Sirio, remarcando que “esta lucha se está llevando a cabo para ellos”.
Por su parte, el ministro de Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, reafirmó que su gobierno no entregará Afrin al Ejecutivo sirio.
El funcionario además destacó que Bashar Al Assad “tiene que irse”. “Hay que pasar por un proceso de regulación política. Nosotros no pretendemos tener el control de las tierras sirias. Sin embargo, la entrega de estas tierras (Afrín) al régimen de Assad está excluida. Hoy (régimen de Asad) está luchando contra las Unidades de Protección Popular (YPG), pero mañana todo estará bien entre ellos”, señaló Cavusoglu a la cadena NTV.
“Cuando lanzamos nuestra operación en Afrin contactamos con Rusia. (…) Los observadores rusos se encontraban allí y les pedimos que se retiraran de la zona para evitar incidentes negativos. Y ellos se fueron”, agregó Cavusoglu.
Ante la invasión de Turquía a Afrin, criticada por violar el derecho internacional, las YPG ordenaron evacuar la zona e iniciaron un proceso de resistencia basado en la guerra de guerrillas.
FUENTE: The Region / Sputnik News / Traducción y edición: Kurdistán América Latina
