Invasión turca al norte de Siria profundiza la crisis humanitaria

Las Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria (AANES) aseguró este martes que la invasión militar turca en el norte sirio ha dejado hasta el momento 275.000 desplazados, informó la agencia k.

Hay 70.000 niños entre los desplazados, que abandonaron áreas de las provincias de Hasakah y Raqqa debido a la operación turca iniciada el 9 de octubre contra las regiones controladas por los kurdos en el norte y el noreste de Siria, detalló la AANES a través de un comunicado.

Además, un gran número de pacientes no cuentan con la atención médica apropiada dado que la mayoría de los centros sanitarios en las zonas atacadas han detenido sus operaciones.

Muchos desplazados están durmiendo en las calles o en escuelas ante la falta de servicios básicos, ocasionada porque buena parte de las organizaciones humanitarias han detenido sus actividades en la región.

En un comunicado, la AANES urge a las Naciones Unidas y a la Liga Árabe, además de a la Unión Europea, a intervenir de forma inmediata para dar asistencia médica y apoyo logístico y evitar así que la crisis humanitaria se agrave.

El 9 de octubre, Turquía puso en marcha una masiva invasión militar en el norte de Siria con el objetivo de eliminar a las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS), el grupo que derrotó al Estado Islámico (ISIS) en marzo pasado.

La ofensiva de Turquía llega después de la retirada de las fuerzas estadounidenses del norte de Siria, vista como una señal de abandono de las fuerzas kurdas.

Las fuerzas kurdas y Damasco sellaron recientemente un acuerdo que condujo a la entrada de las tropas sirias en zonas controladas por los kurdos para protegerlas contra el asalto turco.

La AANES también alertó se ha suspendido el suministro de ayuda humanitaria en el norte de Siria, de donde se han retirado “todas” las organizaciones internacionales una semana después de que Turquía comenzara con los bombardeos.

“Tras siete días de la agresión turca apoyada por milicias de mercenarios contra el norte y este de Siria, la crisis humanitaria se intensificó por el corte de la ayuda humanitaria, además de que todas las organizaciones internacionales han suspendido sus trabajos y han retirado a sus empleados”, advirtió la AANES en un comunicado.

La magnitud de la oleada de desplazamientos se producen desde las localidades de Tal Abyad (Serekaniye) y Ras al Ain.

La Media Luna Kurda también confirmó en un comunicado la retirada de las ONG internacionales, lo que ha tenido un impacto “desastroso” en la situación humanitaria.

Los campamentos de desplazados cuentan ahora con un apoyo “extremadamente limitado” y la coordinación se ha vuelto difícil en medio de la volátil situación, siendo la Media Luna Kurda la única organización que todavía ofrecer servicios de emergencia sobre el terreno.

Entre el 9 y el 14 de octubre, la Media Luna Kurda contabilizó 146 civiles heridos y 42 asesinadas por los bombardeos turcos sólo en Ras al Ain y Mabada, si bien advirtió de que hay víctimas que no pudieron ser registradas por problemas con la “distorsión” de las cifras.

Por su parte, UNICEF confirmó que al menos cuatro niños murieron y nueve resultaron heridos por los ataques turcos.

La Directora Ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore,  declaró que “tres centros de salud y vehículos sanitarios y una escuela fueron atacados. La estación de agua de A’louk, que suministra agua a casi 400.000 personas en Hasakah, está fuera de servicio. A UNICEF le preocupa que al menos 170.000 niños y niñas puedan necesitar asistencia humanitaria como resultado de la violencia que se vive en la zona”.

Fore comentó que UNICEF “renueva sus llamamientos a todas las partes en el conflicto y a quienes tienen influencia sobre ellas para que protejan a los niños y niñas en todo momento. Aquellos que luchan en el noreste y en otras partes de Siria deben proteger la infraestructura civil y no utilizarla para ganancias militares”.

FUENTE: Xinhua / EFE / ANF / Edición: Kurdistán América Latina