KJK condena el asesinato de Nabisada y llama a la solidaridad con las mujeres en Afganistán

Tras el asesinato de la ex diputada y activista por los derechos de las mujeres Mursal Nebizada en Kabul, la KJK reitera su llamado a la solidaridad con las mujeres en Afganistán.

La Coordinación de la Comunidad de Mujeres de Kurdistán (KJK) está pidiendo una expansión de la solidaridad con la lucha de las mujeres en Afganistán a la luz del asesinato de la activista por los derechos de las mujeres y ex diputada Mursal Nabisada. La mujer de 32 años fue asesinada a tiros junto con su guardaespaldas en su departamento en Kabul el domingo. Su hermano y otro guardaespaldas resultaron heridos. La mujer asesinada era una de las pocas mujeres políticas que no había abandonado el país tras el traspaso del poder a los talibanes.

La declaración de KJK sobre el asesinato de Mursal Nabisada incluye lo siguiente:

“Siempre hemos sacado fuerza de la lucha de las mujeres en Afganistán, y queremos que sepan que estamos con ellas, haciendo realidad la convivencia, la libertad y la igualdad creada por la filosofía de ‘Jin Jiyan Azadî’ [Mujer, Vida, Libertad] crecer por todas partes.

“Los pueblos y en especial las mujeres son diariamente blanco de masacres”

Los pueblos y en especial las mujeres son diariamente blanco de masacres por parte de los poderes de la modernidad capitalista que buscan proteger y mantener su hegemonía sobre los territorios que se reparten. De esta manera, se pretende abrir nuevas áreas de explotación e interés. Esta política sin duda puede llamarse el colonialismo del siglo XXI. La situación en muchos países y regiones como Kurdistán, Irak, Palestina, Afganistán, Libia, Europa del Este, Siria, Ucrania, etc. ilustra esta inhumana realidad colonialista del sistema capitalista.

“En Afganistán, la voluntad de las mujeres es suprimida por el régimen talibán”

En muchos países de Oriente Medio, el caos y la crisis se intensifican y cada vez más mujeres son masacradas. Afganistán es sin duda uno de los países más importantes de Oriente Medio. Allí hay una crisis y un caos permanentes. Las mujeres son las más afectadas por esta situación. En Afganistán, la voluntad de las mujeres es suprimida por el régimen talibán. La violencia contra las mujeres ha llegado a niveles extremos. En todos los ámbitos de la vida, como la educación, la salud, la economía, el derecho, la política y los asuntos sociales, incluso en los parques y jardines, existen medidas y ataques sexistas que separan a las mujeres de los hombres, excluyen a las mujeres y las obligan a llevar velo. Empezando por el cuerpo femenino, se criminaliza todo lo que tenga que ver con ser mujer. Está prohibido salir a caminar sola o tomar un taxi. A las niñas en edad de asistir a la escuela media y secundaria ya no se les permite ir a la escuela y, según la última decisión, ya no se les permite asistir a las universidades. Si las mujeres protestan contra estas prácticas inhumanas, son castigadas con flagelaciones. El argumento que se utiliza para legitimar estas prácticas, estos crímenes de lesa humanidad, es el fenómeno del honor, que se alimenta del atraso religioso.

“Este régimen misógino, que no reconoce a las mujeres como seres humanos”

Los grupos misóginos creados por el sistema capitalista, como los talibanes, ISIS y al-Qaeda, aprovechan cada oportunidad para hacer la vida casi imposible a los pueblos y en especial a las mujeres de la región a través de sus políticas de feminicidio. Hoy, mujeres de todo el mundo se están organizando contra el feminicidio, la explotación, la esclavitud y los regímenes patriarcales. Están criticando radicalmente el orden explotador. Al mismo tiempo, las mujeres enfrentan una severa violencia sistémica a manos del estado, fuerzas orientadas a la dominación. En un país como Afganistán, desde que las fuerzas reaccionarias, crueles y misóginas de los talibanes fueron devueltas al poder por las potencias hegemónicas en 2021 ante los ojos de todo el mundo, las mujeres han sido excluidas del espacio público. Este régimen misógino, que no reconoce a las mujeres como seres humanos y que tiene como única razón de ser de las mujeres servir a los hombres, masacra a las mujeres día tras día.

“El asesinato de Nabisada es un mensaje contra las mujeres”

El asesinato de la ex diputada Mursal Nabisada por asaltantes supuestamente desconocidos es el resultado de este régimen brutal. Aunque el régimen talibán afirma que los perpetradores son desconocidos, las mujeres sabemos muy bien quiénes son los perpetradores y la mentalidad cruel y oscura de la que surgieron. Se conocen los asesinos de todas las mujeres que han sido asesinadas, como Mursal Nebisada. Es el sistema sexista, obsesionado con el poder, fascista y dominado por los hombres. Un sistema que nada tiene que ver con la humanidad, los derechos y los valores universales. Es la causa y responsable de todas estas prácticas inhumanas impuestas a las mujeres. El tiroteo contra Nabisada, una de las pocas mujeres políticas que no abandonó su país después de que los talibanes tomaron el poder, es un mensaje para las mujeres.

“Hoy, la lucha de las mujeres está en el punto de mira de todos los regímenes”

La actitud de las mujeres kurdas, persas y afganas representa un ejemplo concreto de cómo las mujeres que descubren el poder de la resistencia no dejan de sacudir estos regímenes, sin importar qué régimen, poder o autoridad esté en juego. El sistema patriarcal calcula que puede impedir que las mujeres peleen criminalizando esa lucha. El sistema masculino, temiendo que el poder se le escape de las manos a través de la lucha de las mujeres, está atacando a las mujeres en todo el mundo. Hoy, la lucha de las mujeres está en el punto de mira de todos los regímenes. Temen la presencia de mujeres fuertes que alzan la voz, se organizan y actúan. Esta es la razón de la intensificación de la opresión y la violencia impuesta sobre el trabajo, el cuerpo y la vida de las mujeres. El retroceso de las conquistas de las mujeres, la prohibición del aborto impuesta por los estados y todas las formas de violencia contra las mujeres son expresiones de temor ante el creciente número de mujeres que están ganando conciencia y voluntad.

“Como mujeres, necesitamos organizarnos mucho mejor con la conciencia de autodefensa

En pleno siglo XXI, el sistema patriarcal imperante ataca a las mujeres que por sí mismas crean la esperanza de una vida y una sociedad igualitarias a través de su fuerza. No debe olvidarse que el sistema patriarcal también está tratando de atraer a las mujeres a este sistema, quitar su lucha de su significado original y despojarla de su radicalismo. El liberalismo es el medio para este fin. Estas trampas liberales desarrolladas para desviar la lucha de las mujeres de su camino y contenerla son esencialmente las mismas prácticas opresivas y racistas desarrolladas por los estados patriarcales, las fuerzas yihadistas y los gobiernos conservadores. Sabemos que las orientaciones conservadoras y liberales que sistemáticamente alimentan y fortalecen el sexismo, representan una seria amenaza ideológica para el movimiento de mujeres. Por lo tanto, como mujeres, necesitamos organizarnos mucho mejor con la conciencia de autodefensa contra la violencia machista sistémica y hacer que la lucha sea efectiva e integral en todos los ámbitos. Como mujeres, nuestra ira contra este sistema de gobierno que es responsable de la explotación, las prácticas injustas, la muerte, el asalto, la violación, la tortura y la pobreza que se nos impone en todas las esferas de la vida crece día a día. La lucha y la resistencia de las mujeres podrán poner fin a todas estas prácticas inhumanas.

“Las mujeres que luchan juntas y unidas se vuelven más fuertes y alcanzan la libertad total”

Sobre esta base, llamamos a todas las mujeres a fortalecer su solidaridad contra estas prácticas inhumanas a las que son sometidas las mujeres en Afganistán. Debemos oponernos con nuestra mente, nuestra conciencia y nuestra voluntad organizada a estas fuerzas crueles que son enemigas de la vida y la libertad de las mujeres, que quieren dividir y antagonizar a las mujeres y convertirlas en cómplices de su propia política sucia.

Durante muchos años, las mujeres afganas han resistido y siguen resistiendo las prácticas reaccionarias a través de diversos métodos. Las organizaciones de mujeres afganas, las mujeres activistas y los grupos de solidaridad han presentado una gran resistencia contra el régimen talibán de diversas maneras bajo consignas como “Nunca nos rendiremos”, “Cada casa se convierte en un lugar de protesta”, “Recuerden a las mujeres afganas”. Saludamos esta noble lucha de nuestras hermanas afganas que desafían la opresión y el sexismo, y aprovechamos esta oportunidad para hacer un llamado a todos los movimientos de mujeres del mundo para que se unan con nuestras hermanas afganas, para fortalecer la lucha común en todos los lados y para llamar a todas las mujeres del mundo para oponerse a las sucias políticas de sus propios estados que legitiman a los talibanes. Porque la violencia machista es el punto común. Los que callan sobre esta sucia política hipócrita y pragmática de los estados es cómplice de los crímenes de los estados. Por eso, las mujeres que luchan juntas y unidas se vuelven más fuertes y alcanzan la libertad total.

“Estamos con nuestras hermanas en Afganistán hoy como ayer

Como mujeres kurdas, expresamos que estamos con nuestras hermanas en Afganistán hoy como ayer. Siempre hemos apoyado la lucha por la libertad de nuestras hermanas afganas. Hemos sacado fuerzas de la lucha de las mujeres afganas y seguimos haciéndolo. Queremos que sepas que estamos a tu lado, impulsando la convivencia, la libertad y la igualdad creada por la filosofía de ‘Jin Jiyan Azadî’ en todas partes. La lucha común de las mujeres por la libertad salvará a la humanidad. Por lo tanto, Afganistán definitivamente será liberado a través de la lucha y la resistencia de las mujeres”.

Fuente: ANF

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