Mujeres pioneras de la economía en el Kurdistán sirio

Las mujeres que trabajan en la fábrica de agua natural de Şehid Binefş, en el norte de Siria, fortalecen sus economías autónomas.

En Kurdistán sirio, la vida continúa dando forma con las mujeres. A pesar de la guerra, continúan los trabajos para la construcción de la Autonomía Democrática. Con el fin de que se forme una economía autónoma, las mujeres están haciendo diversas obras. En Şehid Binefş, hace dos meses se inauguró una fábrica natural de agua, ubicada en la provincia de Rimêlan, en el cantón Cizîr. En la fábrica sólo las mujeres trabajan y el agua natural es producida para la salud de la comunidad.

El trabajo de las mujeres está destruyendo tabúes

Besna Salih, una de las directoras de las fábricas, explicó “la producción de agua natural está perfectamente hecha por las mujeres, que toman todas las responsabilidades. En el Kurdistán sirio la mujer asume la misión de liderazgo en la economía, en lo militar, político y en los espacios sociales”.

En la planta, trabajan diez mujeres kurdas y árabes. Besna explicó el proceso de purificación del agua. “En la primera etapa –indicó-, se limpia el agua con nuestras propias herramientas; a continuación, se pone el agua en las botellas, y luego son embaladas y listas para la venta”.

“Estamos llevando a cabo nuestro trabajo con un sistema. Lo más importante, las mujeres están haciendo su trabajo aquí. Se destacan por su propia fuerza sin necesidad de nadie. Las mujeres están reconstruyendo su vida con su propio esfuerzo”, señaló Besna Salih.

El trabajo de las mujeres se hizo visible con la revolución

Nejbîr Remo, una trabajadora de la fábrica, explicó que “después de la revolución, el trabajo de las mujeres se hizo visible lo que nos da una gran moral. Por eso, estamos haciendo nuestro trabajo con una gran energía de la vida. En el futuro vamos a realizar diferentes proyectos con nuestro propio poder”.

Por su parte, Fatime Fadil, otra de las empleadas, indicó que los proyectos alternativos parecen sueños. “No hay lugar para las mujeres en la sociedad árabe”, dijo Fatime señalando que las mujeres están tratando de salir a la vida laboral. “Cada mujer debe trabajar para su propia economía y participar en la vida”, afirmó.

FUENTE: Gazete Sujin (https://gazetesujin.com)/ Traducción y edición: Kurdistán América Latina