La asamblea #NiUnaMenos de Argentina emitió una declaración en solidaridad con la lucha kurda y repudiando los ataques genocidas de Turquía. “Kurdistán en peligro de genocidio: Estamos para nuestras hermanas”, se titula el comunicado.
La organización feminista indicó que el Estado turco “ha cometido ya varios genocidios como el armenio hace cien años. Hoy, ilegítimamente en manos de Erdogan, Turquía se ha vuelto un estado terrorista que en alianza con Estados Unidos planea exterminar al pueblo kurdo, reserva espiritual de los pueblos en lucha, vanguardia feminista y ejemplo de organización y autodefensa de cuerpos-territorios”.
La declaración completa es la siguiente:
Kurdistán en peligro de genocidio: Estamos para nuestras hermanas
Los feminismos del mundo nos manifestamos en alerta por la ofensiva turca contra las comunidades kurdas en Siria e lrak. A pesar de la guerra, a pesar de la batalla ya ganada contra el Estado Islámico por las unidades de autodefensa kurdas, en el norte de Siria el pueblo kurdo ha organizado un territorio autónomo comunitario ecofeminista: Rojava. Rojava es la puesta en práctica de un modo de organización de lo común. Las tierras son comunes, los trabajos y los cuidados se organizan equitativamente y el autogobierne toma las decisiones horizontalmente en asamblea. La autodefensa está a cargo de las Unidades de Protección Femeninas: YPG, ejemplo de lucha armada feminista. Existe incluso dentro del territorio una aldea que es un refugio para mujeres: Jinwar. Las mujeres kurdas son la vanguardia de esta forma de vida: sus saberes se producen y reproducen según una epistemología política feminista llamada Jineoloji, la ciencia de las mujeres, un modo de conocimiento colectivo y horizontal producido en formato asambleario.
El pueblo kurdo es una nación sin territorio pero con una cultura de resistencia milenaria revisada y actualizada desde una perspectiva revolucionaria. Está unido y organizado en un partido comunista, bajo el liderazgo de Abdullah Öcalan, preso político hace más de veinte años en Turquía.
El Estado turco ha cometido ya varios genocidios como el armenio hace cien años. Hoy, ilegítimamente en manos de Erdogan, Turquía se ha vuelto un estado terrorista que en alianza con Estados Unidos planea exterminar al pueblo kurdo, reserva espiritual de los pueblos en lucha, vanguardia feminista y ejemplo de organización y autodefensa de cuerpos-territorios. En el pueblo kurdo vive el sueño de las revoluciones por venir, el mundo que intuimos y deseamos.
Llamamos a los feminismos del mundo a solidarizarnos con las mujeres kurdas que estuvieron siempre apoyando nuestras luchas.
Porque las guerrilleras son nuestras compañeras, gritamos juntas ¡Jin jiyan Azadi! ¡Machistas, fascistas, no pasarán! ¡ElesNao! ¡Ni Una Menos!
FUENTE: #NiUnaMenos / Edición: Kurdistán América Latina