Este 17 de marzo se cumplió un año del fallecimiento de Alina Sánchez (Legerin Ciya), la médica argentina e integrante de las Unidades de Protección de las Mujeres (YPJ), quien falleció en la zona de Heseke, en el norte de Siria, en un accidente de auto.
Alina, que se había recibido de médica en Cuba, se encontraba desde hacía varios años en Kurdistán, donde militaba y luchaba por la libertad de ese pueblo.
En esta conmemoración, desde Colombia los integrantes de Pueblos en el Camino recordaron a la luchadora de la siguiente manera: Te conozco desde siempre, no digo parece, porque adentro lo siento como un hecho. Hace un año, el 17 de marzo de 2018, Legerîn Çiya, compañera Alina Sánchez tuvo ese fatal accidente en Heseke. No la volvimos a ver físicamente, pero sigue presente en cada lucha cotidiana y de largo aliento. Hoy y siempre queremos recordar su memoria vital”.
La familia de Alina vive en Córdoba, Argentina, y gran parte de su niñez y juventud la vivió en esa provincia. Por eso, el Comité en Solidaridad con Kurdistán en Córdoba le dedicó una sentida carta en memoria:
A un año de tu vuelo
Legerîn Çiya – Alina Sánchez
Seguimos tus huellas tejiendo desobediencias
A un año del vuelo de Alina Sánchez en tierras del Kurdistán Sirio, en Rojava. Médica, Mártir de la Humanidad, Compañera Revolucionaria.
Alina, de allá, de acá, de todas partes; en Kurdistán la Revolución escribe tu nombre, nuestras luchas acá te cantan y caminan juntas.
Nuestros acercamientos, abrazos y convicción fraterna, hermanada con las luchas y los procesos revolucionarios de las compañeras de Kurdistán nacieron gracias a compañeras como Alina Sánchez y Maite Amaya.
De sus fuegos nacen nuestros fueguitos para ser lo que somos. De ustedes la ternura y la bravura de los sueños de nuevos mundos. De ustedes como sendero la lucha y organización.
Las revolucionarias nunca mueren: viven en cada unx de nosotrxs, en la bravura de las montañas de Kurdistán, en la rebeldía de todas tus hermanas y compañerxs.
“… esta revolución está haciendo sentir más y más su influencia en todo el mundo porque la revolución del pueblo kurdo no es sólo para las mujeres de Medio Oriente, la verdad de la vida sigue siendo”.
Jîn Jîyan Azadî!
¡Hasta la Revolución Siempre!
Por su parte, la madre de Alina, Patricia Gregorini, le dedicó en Facebook unas palabras: “Me resulta inabarcable no volver a encontrarte x ahí… afuera de mi corazón… en el cuerpo-tierra. También para el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, Patricia envió una adhesión al acto que se realizaba en Córdoba, recordando la lucha de Legerin por la libertad de las mujeres kurdas:
Soy Patricia, la mamá de Alina Sanchez… Creo q a ella le hubiera gustado decirles que sean fieles a su corazón, que no esperen la validación externa ya que no es allí donde un ser se conforma. Alina me decía que tenía responsabilidad de ayudar a miles de niños en Kurdistán y que para ella sería egoísta solo cuidar a los suyos propios.
Así sentía Alina y fue fiel a eso. No se dejó llevar por lo que otros consideraban justo sino lo que para ella estaba bien.
Su amor era más abarcativo y lo vivió así, no dejándose influenciar por quienes lo veían diferente.
Ella tuvo en su habitación un cuadro que decía: “…en el principio fue la acción…” y así vivió su vida, intensa vida. Gracias y fuerza, y amor en su lucha”.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina
