La Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria (AANES) está abrumada con la tarea de proteger el campamento de refugiados de Al Hol de las amenazas de los yihadistas del Estado Islámico (ISIS) que se encuentran detenidos en el lugar, así como con la tarea de garantizar el suministro humanitario teniendo el embargo contra la región y la situación de guerra.
Muchos describen el campamento como “la nueva capital de ISIS”. Esto no es una coincidencia, porque las mujeres de ISIS se han organizado en milicias que aterrorizan a la población del lugar con asesinatos y ataques. Ha habido repetidos brotes de yihadistas en los últimos tiempos. Hace sólo unos días, un oficial moldavo de ISIS, Hisba, fue “liberado” del campamento por el servicio secreto turco (MIT) y llevado a Turquía. Los intentos organizados de fuga se suceden casi todos los días. El viernes pasado, dos mujeres yihadistas de ISIS, Elif Sancar (ciudadana turca) y Fatma Ridvan Aus (chechena), fueron capturadas escondidas en un camión cisterna.
Elif Sancar habló con la agencia ANF sobre las estructuras detrás de “los intentos de liberar a los miembros de ISIS”. Explicó que la “liberación” de los yihadistas por parte del MIT está organizada y financiada por la Fundación para la Ayuda Humanitaria (IHH). También informó de que muchas mujeres llegaron a Turquía a través de la IHH y que las familias pueden obtener un pasaje seguro por 15.000 dólares a través del MIT, ISIS y el Ejército Nacional Sirio (ENS).
Elif Sancar tiene 24 años y viene de la ciudad de Kulp, en la provincia de Amed del Kurdistán del Norte. Siguió a su marido, quien se unió a ISIS en 2014. Su marido murió en batalla, y ella fue arrestada por las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS) en Deir Ezzor, en marzo de 2019. Desde entonces, ha permanecido en el campamento Al Hol con sus hijos. Fue capturada de nuevo el 25 de julio cuando trataba de escapar escondida en un camión cisterna.
En cuanto a la organización de la fuga, explicó: “Llamé a mi hermano por teléfono. Dijo que Turquía nos sacaría del campamento de Al Hol. ‘Turquía paga el viaje a través de la IHH’, me dijo. Mi hermano vive en Turquía. Le he llamado a menudo”. Recibió el teléfono “de una hermana”, como llaman al resto de las integrantes de ISIS.
Sancar prosigue: “Ella pidió un teléfono a un par de hombres. No sé quiénes eran esos hombres”. El nombre de la ‘hermana’ era Ayşe. También fue a Turquía escondida en un camión cisterna. Eso fue hace dos meses. Cuando el camino está despejado, vienen con los camiones cisterna. Ayşe y los demás han declarado haber recibido dinero de Turquía para escapar. Sancar señaló que su familia no podría haber pagado por el rescate, y subrayó que no es posible que los contrabandistas escapen del campamento sin dinero.
La mujer añadió: “No sé nada más sobre la IHH, pero sé que mi hermano recibió dinero del Estado turco por medio de la IHH. Dijo que era necesario estar afiliado. Yo debía escribir el nombre de mi madre, de mis hijos y el mío, y enviar fotos de carnet. Me dijo que tan pronto como me registrara, me iría. También querían información sobre cuántos somos y demás dentro del campamento. Mi hermano entregó el dinero y ahora deberían sacarnos. Hemos obtenido los documentos solicitados”.
La mayor parte de las mujeres de ISIS han escapado de este modo, indicó Sancar, quien contó que viven alrededor de unas 30 o 40 familiares de Turquía en el campamento. Cuando le preguntamos por qué el Estado turco los sacaba del campamento, Sancar respondió: “Porque Turquía nos quiere”.
Vivir bajo la Sharia
La chechena Fatma Ridva Aus nos relató que fue al territorio del Estado Islámico en 2016, porque unos amigos habían ido allí anteriormente y la invitaron. Se fue en 2015 y decidió cruzar la frontera en 2016 y vivir bajo el Estado Islámico en Siria. Pasó por el cruce fronterizo de Bal Al Hiwa, cerca de Idlib, y de allí fue a la región de Siria conocida como “zonas de la yihad”.
Cuando le preguntamos quién la ayudó a escapar, nos dijo: “En el campamento, una ‘hermana’ me dijo que había un camino y que podía ir directamente a Turquía y no iría a la cárcel. Sabía que muchas ‘hermanas’ fueron traídas por la IHH y ahora viven en Turquía. Era un camino seguro y llegaron sanas y salvas. La IHH primero lleva a las mujeres a Jarablus, y de allí a Turquía y luego a donde quieran ir. Eso es lo que me dijeron las ‘hermanas’. Hablé con la contrabandista Ümü Muhammed Turki. Vivía en Idlib y pertenecía a ISIS. También se escapó del campamento de Al Hol. Me puse en contacto con ella por recomendación de las ‘hermanas’”.
Ridva Aus continúa: “Yo le dije: ‘Quiero irme de forma oficial’, y ella dijo ‘Ok’. Ümü Muhammed me dijo que el camino alternativo era más relajado”.
Fatma Ridvan Aus decidió no escapar con la IHH, sino hacerlo directamente por medio de la cooperación entre ISIS-ENS-MIT. Continúa su relato: “Quería ir a Jarablus y de ahí cruzar la frontera. Ümü Muhammed Turki me dijo que debería ir a Jarablus e informar a los representantes del ENS y registrarme. Dijo: ‘Ve allí, regístrate y luego pasa la frontera turca de manera relajada. No estoy segura, pero por lo que tengo entendido Turquía conoce el trabajo de la IHH. Los que van con la IHH también van a Jarablus, pero tienen que vivir en un campamento que hay allí por un tiempo antes de entrar en Turquía”.
15.000 dólares para escapar
Ridvan Aus nos informó que la mujer de ISIS quería 15.000 dólares por persona para el contrabando, y que había recibido este dinero de su familia. El MIT fue informado sobre esto. Ümü Muhammed Turki había contactado a los padres de Aus por sí misma. “El servicio secreto turco conocía bien a Umü Mohammed. Me dijo que el servicio secreto sabía todo y que todo el contrabando estaba planeado. Mi padre y mi madre vinieron a Turquía. Me estaban esperando. Yo no podía decidir si quedarme en Turquía o volver a Rusia. De ir a Rusia, me arriesgaría a ser arrestada. Así que también podía quedarme en Turquía. También se lo mencioné a Ümü Muhammed. Ella me dijo: ‘Sal primero. Tu padre sabrá qué hacer’”.
Durante el reinado de ISIS en grandes partes de Siria, se utilizaron camiones de la IHH para el contrabando de armas y equipo del grupo terrorista.
El yihadista de ISIS Nevzat Geneli, que fue capturado por las FDS, reveló que se había encontrado con el principal sospechoso de la masacre de Suruç, Ilhami Bali, mientras llevaba ayuda a Siria con camiones de la IHH.
En la actualidad, en el campamento de Al Hol viven 68.000 personas, entre ellas 30.000 integrantes de ISIS con sus familiares.
FUENTE: Beritan Srya – Mustafa Coban / ANF / Edición: Kurdistán América Latina