Compañera Lêgerîn, ¡nunca te olvidaremos!

Mustafá Karasu, miembro del Comité Ejecutivo de la Unión de Comunidades de Kurdistán (KCK), recuerda a Alina Sánchez, la médica argentina e integrante de las YPJ falleció el pasado 17 de marzo.

Conocimos a la compañera Lêgerîn (Alina Sánchez) a finales del verano de 2011. Ella fue una de lxs primerxs compañerxs de América Latina que vino con nosotrxs, a Kurdistán, ¡quizás incluso la primera! La línea del socialismo democrático y la liberación de la mujer promulgada por el Líder Apo (Abdullah Öcalan) hicieron que se apresurara a venir a las montañas de Kurdistán. Además eligió para sí misma un nombre clave que coincidía con su personalidad. Cuando nos conocimos, estábamos sorprendidxs pero también emocionadxs. El hecho de que una compañera de la patria del Che Guevara viniera con nosotrxs nos hizo sentir como si Argentina viniera a nosotrxs. Para ella, el hecho de estar en un entorno de la lucha por la libertad kurda, fue como si descubriera una nueva vida. Para nosotrxs, fue como si nos hubiéramos reunido con la vida de América del Sur y Argentina. El hecho de que inmediatamente se sintiera cómoda aquí y su risa melancólica, despejaron la extrañeza y la distancia entre nosotrxs. Casi como si una joven kurda hubiera venido con nosotrxs; como si ella no hubiera venido de muy lejos.

Con ella vimos cuán cercana estamos de la gente calurosa de América del Sur. Ella era como una de nosotrxs cuando estuvo aquí. Venir de Argentina y trasmitir esos sentimientos desde el primer día no es fácil. Pero ella era capaz de efectuarlo con su estilo tan natural. Y en poco tiempo ya era como si fuera una guerrillera que ha sido parte de la lucha por la libertad desde hace muchos años. Más allá de todos los esfuerzos y enriquecimientos que ella ha aportado al movimiento de liberación, su muerte nos ha golpeado profundamente. La hemos perdido incluso antes de poder conocerla lo suficiente. Cada vez que pensemos en ella, tendremos los mismos sentimientos.

La amiga Lêgerîn, poco después de haber pisado las tierras de Kurdistán, ya había conocido las dificultades de la revolución kurda. Durante todo el verano de 2011, Irán bombardeó Xinêrê con morteros y lanzacohetes. La compañera Lêgerîn fue testigo de ello. Los cohetes caían como gotas de lluvia sobre Xinêrê. En tal situación, el lugar donde se alojaba la compañera Lêgerîn fue bombardeado de forma muy violenta. A solo 10 o 15 metros de la compañera Lêgerîn, las bombas golpeaban. Por muy poco se salvó de la metralla. Era una situación completamente nueva para ella, pero lo afrontó con tal normalidad como si hubiera estado con la guerrilla desde hace años. Sus reflejos no eran como los de una amiga que acaba de venir con nosotrxs. De esta manera, ella entendió bajo qué condiciones se está realizando y tuvo que desarrollarse la revolución en Kurdistán. Además vio cómo la guerrilla continúa su vida bajo el bombardeo.

Después de un tiempo, hicimos un largo viaje junto con el amigo Fuat (1), los amigos que eran responsables de nuestra seguridad y nuestra amiga Lêgerîn. Íbamos a Behdînan (2). Pasamos cerca de un lugar no muy lejos del Zap (3), que solo unos pocos días después fue bombardeado por aviones de combate turcos. Todo el bosque fue bombardeado. Este bombardeo fue tan fuerte que todo el bosque se convirtió en una conflagración en cuestión de segundos. A nuestra derecha, a nuestra izquierda, en frente y detrás nuestro, el bosque entero se estaba quemando. ¿Cómo podría surgir un fuego tan grande de la nada? Lêgerîn miró con asombro las llamas. ¿Cómo alguien puede ser tan pervertido para simplemente quemar los pulmones de la humanidad? Cuando Lêgerîn estaba mirando a este bosque en llamas, uno podía leer esos pensamientos de sus ojos. La ira de Lêgerîn contra los opresores, los colonialistas y los enemigos de la humanidad creció aún más. “No puede ser que simplemente se salgan con la suya quemando este bosque en plan ‘nada para mí, nada para ti’”, dijo. Por otro lado, las bombas arrojadas sobre ella no le dieron tanta rabia. Entonces vimos cuán fuerte era su conexión con la naturaleza. Estos sentimientos, que ella sentía por la naturaleza, son los sentimientos que de hecho deberíamos sentir hacia todos los seres vivos, incluidos los humanos; es un reflejo de autodefensa.

En aquellos días, cuando el Estado turco estaba lanzando sobre nosotrxs su tormenta de fuego, debatimos mucho con nuestro amigo Fuat y Lêgerîn. También estaba con nosotrxs un traductor kurdo-español. Este intérprete también era un cuadro del PKK. Durante días discutimos la comprensión de la libertad de las mujeres del Líder Apo, la mentalidad del Estado y del poder, el sistema confederal democrático, el anticapitalismo, el antiimperialismo y el socialismo democrático. Ella era muy sensible respecto a las defensas del Líder Apo. Un poco más tarde, dijo chapurreando el kurdo, que había aprendido en muy poco tiempo: “el amigo no lo está traduciendo correctamente”. El paradigma de una sociedad con libertad de mujeres, ecológica y democrática fue como un nuevo aliento para ella, como el portal a un mundo nuevo. Por lo tanto, ella quería entenderlo de la mejor manera posible. Especialmente a esta ideología, esta teoría de la liberación de la mujer, ella la veía como una fuerte respuesta a la búsqueda de una que aspira a conocimiento. Había encontrado lo que estaba buscando. Ahora, su objetivo más importante era interiorizar todo esto. Ella era tan entusiasta como una colegiala que es nueva en la escuela. Como una persona sedienta en el desierto, ella quería beber tanto como fuera posible de esta fuente. Para ella era muy importante darle sentido a cada momento que pasaba en las montañas de Kurdistán.

Por un tiempo se quedó con nosotrxs. Luego, lxs amigxs decidieron que debería regresar a Sudamérica. Por un lado, para terminar sus estudios de medicina en Cuba, por otro lado, para difundir allí las ideas del PKK. Con esta decisión, regresó a América del Sur a través de Europa. Mientras que seguía en contacto con nuestra diplomacia y relaciones públicas en Europa, realizó tareas en América del Sur. Además, completó sus estudios de medicina. Mientras trabajaba en Argentina, Cuba y otros países sudamericanos, nunca olvidó a sus compañerxs en Kurdistán. Cada vez que encontraba la oportunidad, nos enviaba saludos y felicidades. Una vez nos envió un paquete de cigarros cubanos. Ella sabía que no fumamos, pero eran de la tierra del Che Guevara. Ella quería que tomemos una foto con los cigarros y le enviemos. Entonces, como era algo especial y nos recordó a Lêgerîn, hicimos 5 o 6 fotos mientras fumamos cigarros y los enviamos a Europa. No tuvimos contacto directo con ella. Estas fotos, que hicimos a petición de la compañera Lêgerîn, las guardaremos en nuestra memoria como un momento hermoso.

Fumamos la mitad de los cigarros. Amigos como heval Abbas (4), que usualmente no fuman, aspiraron estos puros de La Habana solo en memoria del Che Guevara. El resto se lo regalamos a un amigo que era parte de la delegación de Imrali y venía a Qandil de vez en cuando. Por supuesto, estos habanos tenían un valor. Especialmente porque nos los envió una revolucionaria sudamericana.

La sociedad sudamericana y sus revolucionarios tienen su propio tesoro de peculiaridades. Las sociedades sudamericanas fueron las últimas en entrar en contacto con el Estado y el poder. La historia de los Estados en América del Sur tiene solo unos 300 o 400 años. Es por eso que el aroma de la libertad aún no ha abandonado estas sociedades, su cultura y su actitud. Incluso podemos decir que las sociedades en América del Sur poseen el espíritu de una sociedad libre. Este espíritu libre, que llegó a conocer el Estado y el poder tarde, por supuesto también se refleja en lxs revolucionarixs. El espíritu de libertad es inmediatamente perceptible. Unx puede ver de inmediato que son hijas y hijos de una sociedad que no ha vivido en esclavitud durante tanto tiempo. Las sociedades del Oriente Medio han experimentado innumerables capas de Estado y poder durante milenios. En este sentido, han interiorizado la hegemonía en una variedad de formas. Sin embargo, se podría decir que, en comparación con las sociedades del Oriente Medio, el alcance y la profundidad de la cultura en América del Sur son ligeramente menores. Se podría decir que las poblaciones del Oriente Medio y sus avances socialmente revolucionarios tienen algunas características más fuertes a nivel cultural. En la síntesis del espíritu de libertad de Sudamérica y la profundidad histórica, social y cultural del Oriente Medio, se crean los medios para liberar a la humanidad. Cuando combinas estas dos características, ninguna fuerza en el mundo puede detenerlas. Cuando el espíritu revolucionario de América y el de Medio Oriente se complementen de una manera firme, serán capaces de desempeñar un papel histórico en unificar a la humanidad mediante la libertad, la democracia y el socialismo.

Encontrar a la compañera Alina Sánchez, buscadora de la verdad, en las montañas kurdas y en las filas del movimiento de liberación, fue una reunión llena de estas hermosas cualidades. Estos valores que se complementan entre sí le han atraído y unido a la lucha por la libertad. En cuanto a las diversas dimensiones y desarrollos de este encuentro, será aún más importante tanto para Oriente Medio como para América del Sur en sentido de un impulso revolucionario. Haber conocido a la compañera Lêgerîn, haber sentido su compañerismo, siempre nos recordará eso.

Lêgerîn con su carácter de un espíritu libre vino corriendo al Kurdistán, al lado del pueblo kurdo que hoy en día juega un papel pionero en las luchas por la libertad en el mundo. Ella sentía, veía y entendía que lo que encontró en la lucha por la libertad en Kurdistán y Oriente Medio, es algo que mejor corresponde a su espíritu libre. Cuando en Rojava se empezó a implementar el sistema del confederalismo democrático y a construir el socialismo democrático como una alternativa al Poder y el Estado, con la construcción del Socialismo Democrático, se apresuró a venir otra vez a Kurdistán, a Oriente Medio, a Rojava. Cuando llegó a Kurdistán, quería ir a Rojava para ayudar a construir un sistema de salud y llevar a cabo la lucha revolucionaria. La doctora Lêgerîn vio en Rojava un lugar donde su profesión daría más fruto. Hubo una revolución popular; las necesidades de salud de la gente eran muy altas. Sus estudios de medicina fueron de gran importancia en Rojava.

Su muerte temprana nos pone a todxs lxs amigxs muy tristes. La doctora Lêgerîn todavía tenía grandes sueños sobre la revolución. Quería interiorizar a fondo el paradigma del Líder Apo y, sobre la base de la experiencia de Rojava, aportar este paradigma a Sudamérica. ¡Y eso especialmente como una mujer liberadora! Se habría convertido en un cuadro de liderazgo en América del Sur con el socialismo democrático, la liberación de la mujer y el sistema democrático y confederal. Pero su vida no alcanzó para ello. Pero nosotrxs, sus compañerxs aquí, así como sus compañerxs sudamericanxs, en todo caso vamos a realizar y llevar al éxito los sueños que la doctora Lêgerîn ha tenido en la patria de Che Guevara.

Compañera Lêgerîn, ¡nunca te olvidaremos!

Notas:

  1. Ali Haydar Kaytan, uno de los miembros fundadores del PKK. Actualmente forma parte del comité ejecutivo de la KCK (Unión de las Comunidades de Kurdistán) en las montañas de Qendîl (Kandil).
  2. Región en Başûr (Kurdistán de Irak), cerca de la frontera con Turquía y Rojava.
  3. El río Gran Zab (o Zap) nace en las montañas del sudeste de Turquía y discurre a lo largo de 426 km adentrándose en Irak antes de desembocar en el río Tigris a la altura de la ciudad de Mosul, del que junto con el Pequeño Zab, son sus mayores afluentes.
  4. Duran Kalkan (nacido en 1952 en el pueblo Tufanbeyli en provincia de Adana), viene de una familia turca. En 1978 terminó la universidad en Ankara, donde estudió ciencias y literatura. Participó en el primer congreso del PKK en noviembre de 1978 y es uno de lxs miembros fundadores del partido. Durante años fue comandante de la guerrilla, en 1987 se trasladó a Alemania. Detenido en 1988 por “pertenencia a una organización terrorista”, pasó 5 años en las cárceles alemanas. Después de su liberación, volvió a las montañas de Qendîl y continuó como comandante de la guerrilla. Actualmente forma parte del comité ejecutivo de la KCK (Unión de las Comunidades de Kurdistán).

FUENTE: Mustafá Karasu* / NûceCiwan / YeniÖzgûrPolitika / Fecha de publicación original: 26 de marzo de 2018 / Traducción: Rojava Azadi – *También conocido como heval (compañero) Hüseyin Ali o heval Avareş (en kurdo Agua Negra, simple traducción del significado de su apellido turco Karasu), nació en 1950 en la pequeña ciudad de Gürün en la provincia de Sivas en el seno de una familia turca de fe aleví. Conoció a Abdullah Öcalan mientras estudiaba Ciencias Políticas en la Universidad de Ankara. Uno de lxs miembros fundadores del PKK. Detenido después del golpe de estado de 1980 en Turquía, pasó 12 años en las cárceles turcas. Después de su liberación se trasladó a Alemania, donde entre otras, fue presidente de Kürdistan İşçi Kültür Merkezi (Centro Cultural de Trabajadorxs del Kurdistán) en Berlín. En 1996 viajó a las montañas de Qendîl. Actualmente forma parte del comité ejecutivo de la KCK.