Crece la preocupación por la situación de Abdullah Öcalan

Luego de que se produjera un incendio en la isla de Imrali, sobre el mar de Mármara, donde se encuentra encarcelado hace 21 años el líder kurdo Abdullah Öcalan, tanto sus abogados como diferentes organizaciones y sectores en Kurdistán se pronunciaron y demandaron que el Estado turco permita que el fundador del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), pueda ser visitado por sus familiares y representantes legales.

Los abogados Ibrahim Bilmez, Raziye Turgut, Rezan Sarıca y Mazlum Dinç, que representan al dirigente kurdo, presentaron una nueva solicitud para visitar a su representado. En Imrali, una base militar donde funciona la prisión de máxima seguridad, también se encuentran recluidos Hamili Yıldırım, Ömer Hayri Konar y Veysi Aktaş, representados por los mismos letrados.

Los abogados emitieron una declaración en la que explicaron que “el 27 de febrero de 2020, se ha podido saber a través de los medios de comunicación un informe sobre un incendio en la isla de Imrali. Desde el 7 de agosto de 2019 hasta hoy, se han impedido las conversaciones con nuestros clientes en Imrali. No tenemos información sobre ello. Por esta razón no conocemos ningún detalle sobre el incendio que ha estallado y sólo hemos oído hablar de él en los medios de comunicación”.

“Para poder ver el estado de salud de nuestros clientes y la situación de la prisión y para remediar nuestra preocupación –continuaron-, hemos presentado solicitudes al Ministerio de Justicia y a la Fiscalía General de Bursa. Estamos siguiendo de cerca los acontecimientos. Les recordamos que bajo las condiciones de aislamiento cualquier tipo de noticia debe ser tratada con seriedad. Pedimos la atención del público sobre el asunto”.

Los abogados agregaron “que Imrali fue diseñado en 1999 como una prisión para una persona, en este caso nuestro cliente Abdullah Öcalan. En 2015, nuestros clientes Ömer Hayri Konar, Hamili Yıldırım y Veysi Aktaş fueron reubicados en Imrali. Nuestros clientes están detenidos contra su voluntad y con regulaciones legales en una isla que se considera un área militar restringida y donde las visitas no son posibles. Es inevitable el hecho de que Öcalan y nuestros otros clientes se vean directamente afectados por el incendio. Bajo las condiciones existentes, es cuestionable si se puede hacer una intervención inmediata en emergencias que amenazan la vida. Esto lleva a una preocupación y duda justificadas”.

Los letrados denunciaron que “el aislamiento absoluto de nuestros clientes en Imrali constituye un delito. Adoptar una postura contraria es una actitud moral y humana, y se sitúa en el marco de los derechos democráticos. Asumimos que el público mostrará la debida atención. Hacemos un llamado a las autoridades pertinentes para que asuman sus responsabilidades”.

Por su parte, la copresidencia del Consejo Ejecutivo de la Unión de Comunidades de Kurdistán (KCK) se pronunció sobre la situación en Imrali. En un comunicado, expresaron: “Funcionarios del gobierno turco han anunciado que se ha desatado un incendio forestal en la isla de Imrali, donde el presidente Apo (Öcalan) permanece encarcelado en confinamiento solitario desde hace 21 años”.

“Turquía está experimentando un desarrollo muy crítico y los kurdos sufren un agravamiento de las políticas genocidas –advirtieron desde la KCK-. Es un proceso de colapso para el poder fascista del AKP-MHP. Todo el mundo alberga una profunda sospecha sobre el incendio en Imrali y cómo ocurrió. Llama la atención que el incendio se produjera en un día de invierno en una zona de alta seguridad, y en un momento muy delicado para Turquía”.

En el comunicado puntualizaron que “cada evento e intento de aproximación en el lugar donde se encuentra el presidente Apo, tiene un significado político. El Estado turco y el sistema internacional son responsables de todo lo que sucede en Imrali. El sistema de Imrali es también un sistema establecido y controlado por los poderes internacionales. Particularmente, Turquía es miembro del Consejo de Europa y el Consejo de Europa tiene una gran responsabilidad por medio del CPT”.

“Nuestro movimiento y nuestra gente no creen en los comunicados del gobierno fascista, enemigo de los kurdos –manifestaron desde la KCK-. Los abogados del presidente Apo deben ir a Imrali de inmediato y explicar lo que ha sucedido. Nuestra gente, amigos, mujeres y jóvenes deberían permanecer en las calles hasta que los abogados y los familiares puedan ir a Imrali y hacer un comunicado. Nuestra gente debería mostrar su reacción de la forma más determinante y llenar las plazas en las cuatro partes de Kurdistán y fuera de Kurdistán. Nuestra gente debe movilizarse en todas partes”.

Al finalizar el comunicado, se remarcó que “sobre estas bases, hacemos un llamamiento a nuestra gente, a las fuerzas democráticas, a todas las secciones antifascistas, mujeres y jóvenes a que se alcen contra el aislamiento y muestren sus reacciones de la forma más determinante posible. Otra vez, vemos que si el sistema de aislamiento en Imrali no cesa y si el derecho a la seguridad, la salud y la libertad del presidente Apo no son garantizados, la libertad, la democracia, la justicia y la paz no llegarán a Turquía”.

En tanto, las Madres por la Paz de Turquía y Kurdistán también demandaron que se pueda visitar a Öcalan. Perihan Akbulut, integrante de la organización, enfatizó que es necesario permitir inmediatamente una visita al líder kurdo. “Las instituciones autorizadas deben hacer una declaración urgente sobre esta situación”, dijo Akbulut.

“Ningún kurdo debe quedarse en casa hasta que se den noticias de Öcalan. Hago un llamamiento a todos los kurdos: ¡pónganse de pie! A los abogados de Öcalan se les debe permitir ir a la isla y reunirse con Öcalan”, aseveró Akbulut.

Desde el Partido de la Unidad Democrática (PYD, principal organización política kurda en Rojava-norte de Siria) se manifestaron al respecto en una declaración, en la cual expresaron que “llama especialmente la atención que el incendio estalló en el aniversario del Acuerdo de Dolmabahçe (anunciado el 28 de febrero de 2015 como parte del proceso de resolución entre Öcalan y el Estado turco)”.

“Por esta misma razón, este no puede verse como un incidente ordinario, y genera sospechas y preocupaciones entre nosotros y nuestra gente –señalaron-. Destacamos nuestras preocupaciones y las de la gente sobre la situación del líder Abdullah Öcalan y exigimos que los abogados tengan acceso a Imrali y puedan hacer una declaración para aliviar nuestras preocupaciones lo más rápido posible”.

El PYD pidió a la gente que salga a la calle hasta que Öcalan se reúna con sus abogados y se haga una declaración confirmando que se encuentra en buen estado de salud y con su seguridad garantizada.

FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina