El régimen de fideicomisarios (interventores) del Estado turco en el Kurdistán del Norte (Bakur) vuelve a ser historia. En las elecciones locales del domingo, el partido DEM, sucesor del HDP (Partido Democrático de lod Pueblos), ha logrado recuperar municipios que habían sido puestos bajo administración judicial después de la votación anterior en 2019.
Asimismo, el DEM también se ha convertido en la fuerza más fuerte en distritos que la oposición democrática kurda no había podido ganar en elecciones anteriores, como en Muş, y recuperó la mayoría que perdió hace cinco años en Dersim y Agirî. En el cómputo global de todo el Estado turco, el partido se mantuvo ligeramente por debajo del 5,8%.
Según los resultados preliminares, junto con las tres grandes ciudades de Amed, Mardin y Van, el DEM ha logrado un total de 77 alcaldías. Es decir, doce más que en las últimas elecciones locales.
“Los verdaderos vencedores de estas elecciones son el pueblo kurdo, los trabajadores y las mujeres”, declaró Tuncer Bakırhan, copresidente del DEM, ayer por la noche en Ankara.
“El pueblo de Kurdistán ha afirmado su voluntad de democracia y paz, de poner fin a la guerra y de encontrar una solución política a la cuestión kurda”, remarcó el dirigente.
A esto, agrego: “Lo que triunfó fue el deseo de democracia local y la superación de la mentalidad centralista y monista. Los que quieren asegurar su existencia mediante la hostilidad a los kurdos han perdido. Queríamos acabar con la opresión y la explotación del AKP en las urnas. Lo hemos conseguido y esta voluntad debe respetarse”.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina
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