Hrant Dink, redactor jefe de Agos, fue asesinado en Estambul hace 16 años.
El destacado periodista armenio turco Hrant Dink fue asesinado en Estambul el 19 de enero de 2007. Era director del periódico Agos y había escrito y hablado largo y tendido sobre el genocidio armenio de 1915. Era conocido por sus esfuerzos por la reconciliación entre turcos y armenios.
En el momento de su muerte, estaba siendo juzgado por violar el artículo 301 del Código Penal turco y “denigrar la turquedad”.
Dink fue asesinado en Estambul hacia las 12:00 GMT del 19 de enero de 2007, cuando regresaba a las oficinas de Agos.
El asesino se presentó como un estudiante de la Universidad de Ankara que quería reunirse con Dink. Al ser rechazada su petición, esperó un rato frente a un banco cercano. Según testigos presenciales, Dink fue tiroteado por un hombre de entre 25 y 30 años, que disparó tres veces a la cabeza de Dink por la espalda a quemarropa antes de huir del lugar a pie. Según la policía, el asesino era un hombre de entre 18 y 19 años. En las primeras horas de la investigación policial se detuvo a dos hombres, pero posteriormente fueron puestos en libertad.
Un día después del asesinato, la policía anunció que el tirador había sido identificado en las imágenes de vídeo recogidas tanto por la red de vigilancia electrónica MOBESE de Estambul (con más de 4.000 cámaras en toda la ciudad) como por las cámaras de seguridad locales. Más tarde, difundieron fotos al público, al tiempo que instaron a todos los ciudadanos a colaborar en la investigación.
Las agencias de noticias informaron de que el tirador había sido identificado como “Ogün Samast”, un adolescente nacido en 1990 y registrado como residente en Trabzon.
El padre de Samast lo identificó por las fotos publicadas y alertó a las autoridades. Seis personas, entre ellas el amigo de Samast, Yasin Hayal, que había participado en un atentado contra un restaurante McDonald’s en Trabzon en 2004, fueron detenidas y llevadas a Estambul.
El 25 de julio de 2011, Samast fue declarado culpable de asesinato y posesión de armas por el Tribunal Penal de Menores. Fue condenado a 22 años y 10 meses de prisión.
El 16 de enero de 2012, el 14º Tribunal Penal de Estambul dictaminó que no había conspiración detrás del asesinato declarando que se trataba de un asesinato ordinario. Yasmin Hayal fue declarado culpable de asesinato y condenado a cadena perpetua, mientras que otros dos hombres fueron declarados culpables de ayudarle y condenados a 12 años y 6 meses de prisión.
En 2013, un testigo secreto informó a los fiscales de la participación del JITEM y la Gendarmería en el asesinato de Dink.
El 12 de enero de 2015 se dictaron órdenes de detención contra dos agentes de policía, lo que los convirtió en los primeros funcionarios públicos detenidos en la investigación.
Uno de los turcos condenados por complicidad en el asesinato del periodista armenio Hrant Dink comenzó a cumplir su pena de prisión tras años huido. Ahmet Iskender fue declarado culpable por un tribunal de Estambul en 2012 de ayudar al ultranacionalista Ogün Samast, condenado por el asesinato del redactor jefe del diario armenio Agos. Iskender recibió una pena de doce años y medio de cárcel por deshacerse del arma homicida, dar dinero al asesino y facilitarle su teléfono. Esta sentencia fue confirmada por el Tribunal de Casación turco en 2013. En 2019, se le impusieron otros dos años de prisión por pertenencia a una organización terrorista armada.
Sin embargo, Ahmet Iskender, que fue detenido junto con el asesino y otros tres cómplices pocos días después del asesinato de Hrant Dink, el 24 de enero de 2007, se fugó al extranjero poco después de su puesta en libertad en julio de ese mismo año. En 2015 se supo que residía en Bélgica. El Ministerio del Interior de Kirguistán anunció que había detenido a Ahmet Iskender en la capital, Bishkek, el 26 de febrero. El hombre, de 38 años, utilizó un documento de identidad y un permiso de conducir falsificados para identificarse, y posteriormente fue detenido por tenencia ilícita de armas, delincuencia organizada y falsificación de documentos.
Fuente: ANF
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