El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, le dijo ayer al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, que grupos kurdos en Turquía y Siria están trabajando con anarquistas presuntamente vinculados a la violencia durante las protestas pacíficas en los Estados Unidos.
En un llamado a Trump, Erdogan le dijo que las personas que cometen actos de violencia y saqueos en los Estados Unidos están cooperando con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en Turquía, y con las Unidades de Protección del Pueblo (YPG) en Siria. Durante la conversación, Erdogan y Trump también discutieron sobre Libia, según informó la agencia de noticias turca Anadolu.
El PKK lucha por mayores derechos políticos kurdos en Turquía, y Ankara y Washington lo consideran una organización terrorista. Las YPG en Siria comparten la ideología comunalista con el PKK, pero niega más vínculos. Estados Unidos respalda a las YPG en su lucha contra el Estado Islámico (ISIS), algo a lo que Turquía se opone de manera firme, acusando a las YPG de ser la versión siria del PKK.
Los comentarios de Erdogan están relacionados con el denominado los Antifa en los Estados Unidos. Este movimiento libremente organizado, cuyo nombre significa antifascista, supuestamente ha participado en muchas manifestaciones contra Trump, algunas de ellas violentas, así como en las continuas protestas en contra del asesinato del afroamericano George Floyd por parte de la policía.
Algunos partidarios antifa lucharon en las YPG en Siria, que es la base de las afirmaciones del gobierno turco de una supuesta conexión. Tras los informes de presuntos vínculos YPG-antifa en los medios de comunicación turcos, algunos combatientes extranjeros de las YPG le dijeron a Al Monitor que había algunos partidarios antifa en el grupo, pero que no había una relación formal entre ambos movimientos.
El año pasado, Turquía ocupó ilegalmente algunos territorios de las YPG después de una extensa ofensiva militar. Desde las YPG dicen que Turquía y sus aliados sirios están buscando un cambio demográfico forzado contra los kurdos en las áreas ocupadas.
Los comentarios de Erdogan siguen a la amenaza de Trump de etiquetar a Antifa como una organización terrorista, debido a su presunto papel en el saqueo y la destrucción de propiedades que ocurrieron durante las protestas en los Estados Unidos.
Los dos presidentes también acordaron en su conversación trabajar juntos por la paz y la estabilidad en Libia, según la agencia Anadolu. Turquía es uno de los principales patrocinadores del Gobierno de Acuerdo Nacional (GNA) reconocido por la ONU en Libia. El GNA ha tenido recientemente un éxito militar significativo al aferrarse a la capital, Trípoli, contra el ejército nacional libio del general Khalifa Haftar, con sede en el este del país. Estados Unidos se opone al apoyo ruso a Haftar.
FUENTE: Al Monitor / Traducción y edición: Kurdistán América Latina