Seis niños que fueron secuestrados en aldeas amazónicas por la Jamaat de Sulaimani, grupo religioso turco también conocido como suleymanitas, y llevados a casas comunales en Turquía, han sido devueltos a su país de origen tras una decisión tomada por la dirección de la propia organización.
Según un informe de Artı Gerçek, la preocupación en el seno de los suleymanitas ha aumentado, ya que el caso atrajo la atención de Interpol, que actualmente investiga el hecho como un posible caso internacional de tráfico de seres humanos. Los niños llegaron a São Paulo, Brasil, el viernes pasado por la noche.
En mayo de este año, se supo que un hombre llamado Abdülhakim Tokdemir y su equipo, actuando en nombre de la comunidad de Sulaimani, habían transportado a niños de familias empobrecidas que vivían en aldeas amazónicas cerca de la frontera con Colombia, hasta la ciudad de Manaos, situada a más de 950 kilómetros, obteniendo documentos firmados por sus familias.
A continuación, los niños fueron sometidos a tres años de internado islámico antes de que seis de ellos fueran trasladados a Turquía, en febrero de 2022. Posteriormente, fueron internados en residencias religiosas de la provincia occidental de Kütahya y del distrito meridional de Tarso.
Tras el incidente, que acaparó la atención de los medios de comunicación, tanto las fuerzas del orden local como Interpol iniciaron amplias investigaciones sobre el asunto. Se espera que una delegación del Parlamento brasileño viaje a Turquía en los próximos días.
Aunque las familias habían proporcionado a Tokdemir documentos que les autorizaban a llevar a sus hijos a Manaos con fines educativos, Interpol consideró legalmente inaceptables los “documentos firmados que se utilizaban para sacar a los niños del país”.
La jamaat musulmana sunní-hanafí, también conocida como Movimiento Sulaimani, es una comunidad muy extendida en Turquía y conocida por su influencia en la política turca.
FUENTE: Medya News / Traducción y edición: Kurdistán América Latina
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