El ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, reiteró hoy el interés de su país por organizar una zona de seguridad al norte de Siria de 30 a 40 kilómetros de ancho.
Citado por el canal NTV de la televisión turca, Akar reclamó que “a zona de seguridad en Siria debe extenderse de 30 a 40 kilómetros adentro desde la frontera turca”, y añadió que espera que Estados Unidos “se mueva en este asunto”, informó la agencia Prensa Latina.
Siria califica el acuerdo turco-estadounidense sobre la zona de seguridad de ataque flagrante contra la soberanía y la integridad territorial de su país y una grave violación de los principios del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas.
Damasco rechazó de forma categórica cualquier tipo de entendimiento estadounidense-turco sobre la creación de una supuesta zona segura en el norte de Siria, según un comunicado emitido el pasado 27 de julio por el Ministerio de Relaciones Exteriores sirio.
“Siria seguirá luchando contra el terrorismo hasta su definitiva erradicación, y contrarrestará todas las tendencias separatistas que representan una amenaza para la soberanía, la unidad y la integridad territorial”, concluyó el texto de la cancillería siria.
El ministro de Defensa turco aseguró que su país está dispuesto a actuar de manera independiente a la hora de crear una zona de seguridad y “tenemos planes alternativos B y C”, apuntó.
La franja donde Turquía pretende crear la zona segura está bajo control de las milicias kurdas Unidades de Protección Popular (YPG), respaldadas por Washington y a las que Ankara considera terroristas por sus vínculos con el Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), activo en Turquía.
Funcionarios de Ankara y Washington, reunidos en la capital turca, acordaron el 7 de agosto establecer un centro de operaciones conjuntas y coordinar esfuerzos para crear una zona tapón en el norte de Siria.
Mientras Turquía continúa redoblando sus amenazas, desde la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria (AANES) también rechazaron la “zona segura”, ya que implica reforzar a los grupos terroristas que operan en la región, respaldados por Ankara.
En ciudades como Dirbêsiyê, Til Temir, Gire Spi y Kobane cientos de personas se sumaron a escudos humanos para rechazar los planes de invasión turcos. Talat Yûnis, del Consejo Co-presidencial del cantón de Cizire y representantes del Consejo Democrático Sirio (MSD), declaró que no abandonarán sus tierras y resistirán hasta el final.
Yûnis remarcó que el Estado turco redobla las amenazas, “porque se siente perturbado por los logros alcanzados por medio del proyecto de la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria, que es construido en condiciones difíciles”.
El dirigente demandó a las fuerzas internacionales para que tomen medidas para frenar los ataques de Turquía.
FUENTE: Prensa Latina / ANF / Edición: Kurdistán América Latina