El ejército de Turquía y los grupos terroristas aliados atacaron anoche las aldeas de Merinaz, Qestel Cindo y Celibirin, ubicadas en el distrito de Sherawa, en el cantón de Efrîn, al norte de Siria.
Alrededor de 30 balas de cañón golpearon la región, pero no se pudieron obtener detalles claros sobre los daños infligidos, informó la agencia ANF.
Cada día, el ejército turco y los grupos terroristas atacan aldeas de Efrîn y de la región de Shehba con armas pesadas, lo que causa grandes daños a los hogares y propiedades de la población local.
Por su parte, la agencia de noticias IRNA señaló que en las últimas horas del domingo hubo fuertes enfrentamientos entre las Unidades de Protección del Pueblo (YPG/YPJ) y el ejército de Turquía.
Los combates comenzaron cuando unidades de artillería y tanques del Ejército turco se acercaron a las zonas adyacentes a Efrîn y comenzaron a bombardear los puestos militares de las fuerzas kurdas, lo que luego causó el comienzo de una contraofensiva kurda.
Las YPG/YPJ han conseguido impedir el avance de estos en las zonas en el norte de Siria bajo el control de los kurdos.
En tanto, el viernes pasado la Oficina de Prensa de las YPG publicó el balance de los ataques y enfrentamientos en el Norte de Siria durante el mes de julio.
De acuerdo con el comunicado, las YPG hasta el momento realizan una “batalla eficaz contra ISIS en la operación para liberar a Raqqa”, al mismo tiempo que “el ejército invasor turco y las bandas bajo su mando han intensificado sus intentos de invasión, ataques y violaciones de frontera en Efrîn y Shehba”.
“Los ataques se han visto frustrados ante la resistencia de las fuerzas YPG/YPJ”, expresa el texto difundido.
Según el balance, en julio las tropas turcas y sus aliados efectuaron 159 ataques con tanques, morteros, obuses y armas pesadas, además de que aviones de combate y de reconocimiento del ejército invasor turco, violaron y sobrevolaron Rojava en 20 ocasiones. A esto se suma, que las tropas turcas atacaron posiciones de las YPG/YPJ en cinco oportunidades.
El resultado de los ataques militares turcos en julio dejó como saldo cinco civiles muertos y otros 15 heridos.
Ante esta situación, las YPG/YPJ “revirtieron estos ataques en el marco de la defensa legítima”, afirmó el comunicado
En el balance presentado se detalló que 28 miembros de grupos terroristas fueron abatidos, al igual que cinco soldados turcos.
Por parte de las fuerzas kurdas, un luchador de las YPG y un soldado de las autodefensas fueron martirizados.
En el balance sobre julio se destacó que el ejército turco y sus aliados se dirigen contra “las casas y las áreas cultivadas de los civiles, además de las posiciones de nuestras fuerzas, y, en consecuencia, se producen graves daños materiales causados por morteros y disparos de tanques”.
En otra parte del balance se refiere a la operación para liberar Raqqa, ciudad del norte de Siria considerada la capital de ISIS. “La mitad de la ciudad de Raqqa ha sido despejada de las pandillas”, aseguraron en el comunicado.
Hasta ahora, 986 miembros de ISIS fueron abatidos y otro seis se rindieron ante las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS).
Durante julio, 104 milicianos de las FDS fueron martirizados en Rojava y el Norte de Siria. 83 de ellos cayeron en ataques de ISIS en Raqqa y otros 13 en Şedadê. Tres más cayeron en Efrîn y cinco perdieron sus vidas como resultado de accidentes.
FUENTE: ANF/Edición: Kurdistán América Latina