Zînê Ehmed, que se inició en el arte con la música, también es actriz de teatro. Interpreta el papel de Dîlan, que representa a la cultura kurda, en la serie de televisión Evîna Kurd.
Zînê, que participó en obras artísticas en el Centro de Cultura y Arte Aram Tîgran, en 2018, inició su experiencia en un acto celebrado en su escuela, cuando era más joven. Estaba especialmente influenciada por Awazê Çiya, y su canción Awazek Tê es su favorita. Siguió cantando de forma amateur hasta 2018. Por sugerencia de una amiga, empezó a participar en actividades culturales y artísticas.
La herencia de los dengbêjs
Ehmed afirmó que los dengbêjs “han traído la verdad a la actualidad, cantando vivencias e historia. Es un tipo de música que, de alguna manera, muestra a la gente la importancia de conocer y comprender su cultura y su historia. Expresa la realidad social. También desempeña un papel importante en la concienciación de la sociedad”.
“Podemos ver fácilmente las costumbres y tradiciones kurdas, la historia, la persecución y el sufrimiento infligido a los kurdos en los kilams de los dengbêjs –prosiguió-. Estas razones fueron un factor importante a la hora de elegir estudiar el dengbêjî”.
Los artistas como educadores
Deseosa de ser una gran artista que apelara a los sentimientos, los pensamientos y la cultura de la sociedad kurda, Ehmed se lanzó primero a la música para hacer realidad su sueño, y luego dio un paso hacia la interpretación en teatro y series de televisión. Involucrada en actividades culturales y artísticas desde los 12 años, fue integrante del grupo de teatro infantil Martyr Yekta Herekol. Al desarrollar gradualmente la interpretación, se unió al Grupo de Teatro Mártir Hêvî, que formaba en interpretación a los niños del Grupo de Teatro Mártir Yekta Herekol.
Ahora, Ehmed interpreta el papel de una joven llamada Dîlan en la serie de televisión Evîna Kurd, que narra la Revolución de Rojava.
La mujer como protagonista
Al poner énfasis en la importancia del arte y la participación de las mujeres en él, Zînê explicó: “Teniendo en cuenta la realidad social, no era agradable ni estaba aceptado que las mujeres participaran en el arte. No se conocía la importancia del arte para la sociedad, se ignoraba el arte. La verdad de que la sociedad y el arte no pueden separarse aún no ha surgido del todo, pero tenemos que ver lo lejos que hemos llegado al entrar en el duodécimo año de la revolución”.
“La revolución forma ahora a sus artistas. Niños y adultos ocupan su lugar en las obras artísticas –destacó-. El vínculo entre arte y sociedad es cada vez más fuerte. La cultura se añade a la lista de cosas indispensables para una sociedad. Igual que las mujeres lideraron la revolución, las mujeres lideran ahora la revolución del arte y la cultura”.
FUENTE: Nûjiyan Adar / ANF / Edición: Kurdistán América Latina
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